ru24.pro
World News in Spanish
Апрель
2024

La culpa es del paciente: un 60% de sanitarios no ve la obesidad como una enfermedad

0
Abc.es 
Así se desprende de la encuesta realizada a nivel mundial por la red OPEN ( Obesity Policy Engagement Network) a profesionales sanitarios y responsables de la toma de decisiones en materia de atención sanitaria. España ha participado en ella junto a Italia, Alemania, Canadá, Australia, Brasil, Malasia y Turquía con el objetivo de conocer mejor cómo es la atención actual de la obesidad y las percepciones que influyen en la prestación de dicha atención. En palabras de la doctora Susana Monereo, miembro de OPEN España y responsable de la Unidad de Obesidad, Metabólico y Endocrino del Hospital Ruber Internacional (Madrid), « este dato era esperable y no es más que el reflejo del desconocimiento sobre esta enfermedad que también existe a nivel social . Es evidente, falta conciencia de enfermedad y aún no se adoptado plenamente la idea de que la obesidad es una enfermedad crónica». Noticia Relacionada estandar No Tener hijos acelera el envejecimiento biológico en mujeres, pero no en hombres Rafael Ibarra Cada embarazo durante la edad adulta temprana se asoció con aproximadamente 2,4 y 2,8 meses de envejecimiento biológico acelerado El informe muestra que un 23% de profesionales sanitarios clasifica la obesidad como un proceso reversible que es consecuencia de unas malas elecciones personales activas y habituales por parte del sujeto, para un 15% es una enfermedad temporal causada por multitud de factores, un 14% la describe como un proceso reversible causado por las circunstancias que rodean a una persona (bajo nivel socioeconómico, falta de espacios verdes, etc.) y un 9% se refiere a la obesidad como un proceso reversible causado por un mal estado de salud general. El estigma revela asimismo que el estigma en torno a la obesidad también existe en la comunidad sanitaria. Entre los encuestados, el 38% de los profesionales sanitarios y el 35% de los responsables de la toma de decisiones en materia de atención sanitaria reconocieron tener prejuicios contra las personas con obesidad. «Un pensamiento que hay que cambiar dado que las investigaciones han demostrado que los prejuicios, el estigma y la discriminación por el peso son obstáculos importantes para el cribado y diagnóstico de la obesidad», afirma Felipe Casanueva, miembro de OPEN España y profesor emérito de Medicina de la Universidad de Santiago de Compostela. Un 23% de profesionales sanitarios clasifica la obesidad como un proceso reversible que es consecuencia de unas malas elecciones personales Y todas estas circunstancias conducen a que los profesionales sanitarios hablen de manera proactiva de la obesidad con aproximadamente sólo la mitad de sus pacientes con signos o riesgo de padecerla. Una conversación tras la cual los profesionales sanitarios consideran que el 41% de los pacientes cree que es responsable de su obesidad, el mismo porcentaje entiende que es una enfermedad o que un 49% es consciente de que corre un mayor riesgo de sufrir otras patologías debido a su obesidad. Se estima que un 37,8% de la población española tiene sobrepeso y el 16% obesidad y se prevé que alcance al 29,4% en 20302. «Sin duda, una situación muy preocupante», advierte Monereo. «Sin embargo, estamos ante una de las enfermedades más prevalentes e infravaloradas, y menos diagnosticadas y tratadas de la historia », asevera. Los datos van en una línea similar a los del informe ' La situación sanitaria y social de las personas con obesidad en España ', elaborado la Alianza por la Obesidad , que mostró que dolo el 69% de los pacientes con obesidad recibe un diagnóstico de esta enfermedad crónica. Dicho informe destaca l a necesidad de reconocer la obesidad como enfermedad crónica para mejorar la prevención, atención, investigación e inversión en políticas de salud pública y asegura que el infradiagnóstico de la obesidad se debe a la falta de reconocimiento de esta como enfermedad, según este estudio. Acceso a tratamiento La atención a la obesidad presenta deficiencias en coordinación entre especialidades y enfoque multidisciplinario, así como limitaciones en el acceso a tratamientos y estigmatización. La obesidad tiene un impacto significativo en el sistema sanitario y la economía, por lo que se proponen 12 propuestas para una atención más efectiva y un abordaje integral de la enfermedad. Según el estudio red OPEN, otra de las asignaturas pendientes en nuestro país, al igual que en el resto, es la formación. Sólo un 46% de profesionales sanitarios asegura haber recibido 20 horas o más de formación en obesidad como parte de su formación médica . «La obesidad es el tercer factor prevenible que más reduce la calidad de vida», señala Casanueva. Por tanto, «la formación de todos los profesionales sanitarios al respecto es imprescindible tanto para mejorar la calidad de vida de los pacientes como su supervivencia. En este sentido, es conveniente el diseño de estrategias terapéuticas multidisciplinares». El informe refleja que el 57% de personas con obesidad no tiene su diagnóstico documentado como enfermedad crónica en su historial médico El estudio revela además que tanto profesionales de la salud como responsables de salud coinciden en que la atención a la obesidad está mal organizada. Y, aunque la mayoría de responsables de salud (85%) tienen guías específicas sobre obesidad, solo el 38% las consulta al evaluar servicios relacionados. Entre las personas profesionales de la salud, el 89,5% está al tanto de las guías, pero menos de la mitad (47%) las han consultado y el 28% las considera inadecuadas. Por otor lado, el informe refleja que el 57% de personas con obesidad no tiene su diagnóstico documentado como enfermedad crónica en su historial médico, una oportunidad perdida según los expertos. En cuanto al tratamiento, el texto recomienda un enfoque transdisciplinario y centrado en la persona para tratar la obesidad, pero más del 70% de profesionales sanitarios señala la falta de tiempo y recursos como obstáculos principales. Denuncia además que no hay suficientes especialistas para tratar la obesidad, y que en los planes sanitarios, la obesidad no se considera prioritaria y los fondos se asignan preferentemente a la prevención sobre el tratamiento, pero estas estrategias no reducen la prevalencia de la enfermedad. Por último, abogan por un plan nacional para identificar soluciones que eliminen las barreras a una atención efectiva de la obesidad.