Borrell reivindica las buenas relaciones con Marruecos ante la "inestabilidad en la fachada mediterránea"
BRUSELAS, 9 (EUROPA PRESS)
El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha defendido este martes las buenas relaciones con Marruecos, asegurando que es un país estable y que juega un papel clave en la región frente a la "inestabilidad en la fachada mediterránea".
En un desayuno informativo de Nueva Economía Forum en Bruselas, el jefe de la diplomacia europea ha reivindicado las buenas relaciones con Marruecos, tanto a nivel de la UE como de España. "Está en nuestro interés continuar teniendo buenas relaciones con Marruecos", ha señalado.
"Tenemos mucha inestabilidad en la fachada mediterránea y tenemos que preservar los países que todavía son estables", ha afirmado respecto a Rabat, de quien ha defendido que "juega un papel estratégico" en la región del Mediterráneo y en África.
Todo después de que Borrell haya afirmado minutos antes que usar el comercio y el diálogo como herramienta en las relaciones internacionales no ha funcionado para lidiar con dictadores, como ha demostrado el caso de Rusia.
"Imaginábamos que el comercio era un buen instrumento. La idea de la transformación a través del mercado se basaba en la asunción de que mediante el diálogo y el comercio se induce el cambio social, algo que se ha demostrado falso cuando lidiamos con un dictador", ha subrayado.
Así, el Alto Representante ha recalcado que en lugar de hacer de Rusia un país "más liberal y democrático" las relaciones comerciales con Moscú convirtieron a Europa en dependiente energéticamente de Rusia. "Esta política se convirtió en una amenaza para nosotros porque generó más dependencia energética y esto puede ser una debilidad", ha asegurado sobre el caso de Rusia.
Estas declaraciones de Borrell llegan además en un momento en el que las maniobras militares de Marruecos en aguas frente a las islas Canarias, que se prolongarán hasta el próximo mes de junio, han generado preocupación en el gobierno insular.
El despliegue de varios buques marroquíes en aguas del Sáhara hizo saltar todas las alarmas en Canarias, cuyo Gobierno manifestó su preocupación. Si bien, Exteriores trasladó al presidente autonómico, Fernando Clavijo, que las maniobras "se desarrollan en áreas bien circunscritas y muy alejadas de aguas españolas".