David García (La Bodeguilla de Cañero): «Pensando un día en un reclamo surgió el hacer el flamenquín y el sanjacobo XXL»
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Saborear la comida tradicional cordobesa en el barrio de Cañero depara grandes sorpresas, como el flamenquín y el sanjacobo de tamaño XXL. La Bodeguilla de Cañero , mesón regentado por los hermanos David y Manuel García, los dos cordobeses, ha hecho de estos dos productos su santo y seña, pero hay muchos más. En el año 2015 su padre, Manuel García, se hizo cargo del negocio y desde hace dos ellos se quedaron al frente. En su origen, con el mismo nombre, este establecimiento situado en la calle Funcionario Lázaro Navajas fue bodeguilla de venta de aceitunas y vinos . En la actualidad abren todos los días para comidas y cenas, y sólo cierra los domingos por la noche. -Disponen de barra y salón. ¿La terraza está abierta todos los días? -Sí, los fines de semana y ahora cuando viene el buen tiempo, entre semana también. -¿Cuál es la filosofía actual de La Bodeguilla de Cañero? -Es ofrecer comida casera tradicional. A nosotros nos caracteriza el tamaño del flamenquín y el sanjacobo. David García, con platos de salmorejo y ensaladilla Rafael carmona -¿Cómo se gestó el ofrecerlos con semejantes dimensiones? -Cañero es un barrio que no tiene paso, no es un barrio donde suelas venir para algo. Pensando un día la idea fue hacer algo de reclamo y qué mejor reclamo que un flamenquín de este tamaño. Ya lo había en Córdoba capital, pero no del tamaño que nosotros hicimos. La mesa de trabajo mide 75 centímetros de ancho y dijimos, pues hasta ahí, 75 centímetros. -Y también la freidora tiene que ser grande. -Hemos comprado dos freidoras nuevas de 25 litros de capacidad para poder freírlo. El flamenquín pesa como mínimo dos kilos , dos kilos cien, según, porque lo hacemos a mano. -¿Cuál es su precio actual? -Tenemos dos: uno, el flamenquín de jamón de toda la vida está a 22.50 euros, y el otro va relleno de una masa que inventamos haciendo pruebas, a 22,90 euros. -¿Y el sanjacobo XXL? -También es grande, pesa entre un kilo y medio y un kilo doscientos. Vale 22,50 euros. -¿Hay quien es capaz de tomárselo entero o más bien es para compartir entre varios? -Entero no, no hay nadie que se lo haya comido todo entero. -¿Y cuál es la aceptación? -La verdad es que es muy buena. El reclamo siempre es el flamenquín y el sanjacobo, pero la gente va viniendo y va probando otros platos que tenemos, como el rabo de toro; patatas bravas, que las hacemos diferentes a la mayoría de los sitios; calamares fritos, que es uno de los platos que más se venden; las croquetas de puchero; el volcán de gulas ; carrillada, los callos. Desde hace unos años hemos subido mucho más la calidad de los productos. -¿En dónde está la peculiaridad de las bravas? -Partimos la patata por la mitad, frita y hacemos nosotros nuestra salsa y se la echamos. Los postres «Tarta de queso al horno y tarta de Kinder bueno con chocolate blanco, que son elaboradas por nosotros» -¿Cómo es su clientela: vecinos de Cañero, familias? -La mayoría de la que nos viene son gente de fuera de Córdoba, de otros sitios, gente que viene de turismo y que viene hasta aquí por el boca a boca de otros familiares o por las redes sociales, o buscando algo del flamenquín suele venir. Y también viene gente del barrio. -La ensaladilla rusa y los torreznos de Soria son otros platos destacados en su carta, ¿verdad? -Sí, y también salpicón, salmorejo, berenjenas con miel, cogollos al ajillo, en la línea de la comida típica cordobesa. -¿Y en cuanto a los vinos cuáles no faltan? -De vinos de la tierra solamente tenemos fino, que es Aurora, y luego Ribera del Duero, Rioja y Verdejo. Antiguamente esto era una bodeguita donde se bebía vino, vendían aceitunas, luego lo fueron agrandando los antiguos dueños le dejaron ya el nombre de La Bodeguilla de Cañero. Los hermanos comenzaron el negocio junto a su padre Rafael carmona -¿Y los postres que se pueden pedir? -Tenemos tarta de queso al horno y tarta de Kinder bueno chocolate blanco. Son caseras, como todos los platos que tenemos, que son elaborados por nosotros. Tenemos tres cocineros. -Hablaba antes de la importancia de estar presentes en las redes para que los conozcan fuera, ¿no? -Sí, estamos en Facebook e Instagram, nos lo lleva una empresa de un amigo mío. -Lo de dedicarse los dos hermanos a continuar en el negocio familiar ¿cómo ha sido? -Cuando mi padre cogió el negocio este empezamos también con él. Antes nos dedicábamos a la construcción y decidimos coger esto. Seguimos los tres hasta que ya llegó un momento en que a mi padre le dieron la jubilación hace un par de años o tres. Mi hermano y yo abrimos una empresa nueva y seguimos con el negocio. -¿Y qué buscan: la consolidación o piensan en ampliar? -Con el tiempo nos gustaría hacer una pequeña reforma aquí y después abrir en otro lugar.