El exempleado que tiene prohibido acercarse el Ayuntamiento de Sevilla y a la caseta municipal
0
En enero de 2020 se hizo viral el vídeo de un hombre descalzo y ataviado con una bata que cargaba una cruz en mitad de un fuerte aguacero por las calles de Sevilla. No se trataba de ninguna broma aunque lo pareciera, era la singular manera de protestar de un exempleado municipal que lleva años denunciando su despido de la imprenta municipal. Se llama Jesús Moreno, aunque en internet se le conoce más por su apodo la Cruz de la Injusticia y por orden judicial no puede acercarse a menos de 300 metros de la casa consistorial ni de la caseta del Ayuntamiento. Dos agentes de la Policía Local le entregaron hace unos días la orden del juzgado nº 6 de Sevilla que dicta la prohibición a que se acerque a menos de 300 metros del edificio de la Plaza Nueva y de la caseta municipal. Se trata de una medida cautelar impuesta por el juez tras recibir la denuncia del Ayuntamiento y abrir diligencias por un posible delito de desórdenes públicos. En el mismo documento se le advierte al investigado que en caso de incumplimiento de la medida , podría incurrir en un delito de quebrantamiento de orden judicial. El escrito incluye dos ortofotos en las que se indican los límites que no puede rebasar. La notificación de la orden de alejamiento tuvo la inmediata respuesta de Jesús Moreno por redes sociales. Hizo una captura del documento que le acababan de entregar y la acompañó del siguiente comentario: «La Policía Local de Sevilla coacciona mis derechos a manifestarme con orden de alejamiento. ¡Brutal!» La Cruz de la Injusticia , como se denomina en redes sociales, lleva años protestando en la puerta del Ayuntamiento. A través de los vídeos que cuelga en internet denuncia que no abren la bolsa de trabajo para poder recuperar su puesto de trabajo como maestro de la imprenta municipal y que en su lugar, a pesar de haber aprobado las oposiciones, han puesto a otra persona. No es una queja nueva, lleva años haciéndolo no sólo en la puerta de la plaza de San Francisco sino también en las inmediaciones de la caseta municipal, a la que no ha dudado de llevar hasta allí la cruz que simboliza lo que es para él una injusticia. En sus vídeos no ahorra en gritos ni descalificativos tanto a los concejales, como a personal de los grupos municipales, miembros de la Junta de Personal o a agentes de la Policía Local. Una situación que ha derivado en denuncia y en la apertura de diligencias.