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Март
2024

Jorge Sanz: «El humor es un síntoma de inteligencia»

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Abc.es 

Cuando Jorge Sanz estaba ensayando su papel para 'Por tus muertos' como baterista, rompió dos pares de baquetas en la primera clase. Otro director le hubiera dicho que se pusiera las pilas si quería que su personaje fuera adelante, pero Sayago Ayuso le afirmó que eso era justo lo que quería. Eso ya da pistas de lo que los espectadores se van a encontrar en la película y no es otra cosa que el retorno de 'Metralla', un grupo de rock que triunfó en los 80 pero que tras un malentendido se disolvió. Ahora, 30 años después regresan por petición de una de las grandes discográficas internacionales. «Es la historia de unos músicos nada caricaturizados. A cada uno la vida les ha llevado por un sitio que no siempre es el que más les gusta y tienen que tratar de remontar», reconoce Jorge Sanz a ABC Sanz interpreta a Valen, el personaje más alocado. «Creo que es el que más a gusto está con la vida que lleva. Disfruta de la vida y la exprime al máximo». Él, junto a Miguel (José Mota), la Janis (Marta Marta Belenguer) y el Repollo (Carles Francino) retomarán un viaje que dejaron atrás hace mucho tiempo para redescubrirse y recordar un pasado que remueve. «Es una historia que me encantó desde el principio, me apetecía mucho trabajar con José Sayago. Me parece un regalo de trabajo para cómo está el tema». El grupo embarca un viaje en furgoneta, un vehículo que acaba convirtiéndose, casi, en un personaje más. «Los que nos dedicamos a estar de gira de aquí para allá, que hemos vivido tantas horas en una furgoneta, sabemos que se crea un ambiente especial». Otro guiño más a la vida del artista. Fotograma de 'Por tus muertos' rtve Si bien es cierto que las risas no faltan, la historia también relata la vida de un grupo que se separó, con el respectivo sufrimiento que acarrea cada uno desde aquello, y cómo pasaron de estar en la cima de los escenarios a llevar vidas que jamás hubieran imaginado que vivirían. «La película está muy bien narrada. Somos músicos, pero nada estereotipados. Hay drama, pero también puede uno tomarse la vida con humor y aprender a disfrutar y vivir la vida». Para él, verla es una ocasión para pasar «un buen rato» y «con un poco de suerte» también para reflexionar sobre las cosas importantes de la vida. Jorge Sanz sabe bien lo que dice sobre el humor. «Son buenos y necesarios tiempos para el humor. El humor es un síntoma de inteligencia. El humor nunca está de más. A veces está de menos. Es más, lo echo de menos», asegura. A Sanz le apetecía emprender este proyecto, además de por la historia, por el hecho de trabajar con José Mota. «Me gusta mucho como actor», reconoce. El actor lleva más de 40 años trabajando y conoce muy bien la industria. «España tiene una tradición cinematográfica muy fuerte y somos un país que nos gusta que nos cuenten un chiste y que nos lo cuenten bien», asegura. Por eso, considera que aunque el cine tenga sus altibajos, el cine existirá siempre. «Esto es un oficio que nadie nos obliga a hacer, sino que nace de la vocación, así que siempre va a existir, aunque sea con menos recursos, pero siempre habrá gente con ese impulso de querer contar una historia». Una industria transformada En estos 40 años de trabajo, Sanz ha visto toda una industria que se ha ido transformando y actualizando, sobre todo en asuntos como el machismo. «El machismo estaba completamente extendido. Demasiado. Y fíjate, tengo decirlo, estaba absolutamente normalizado», asegura el actor, que reconoce haber empezado en la época del destape, una época desagradable para las mujeres. «Ahora tenemos la oportunidad y capacidad de mejorar como sociedad y como persona. Tenemos que aprovecharla», reconoce. Si bien es cierto que lamenta aquellos tiempos, ahora reconoce un avance enorme. «Antes había unos comportamientos, no solo en mi oficio, sino en la sociedad en general muy diferentes. Somos afortunados por poder cambiarlos ahora». Si tuviera que resumir su carrera en un par de frases, tiene muy claro cuáles serían. «Me considero un absoluto privilegiado. He vivido una época en la que he visto una evolución como actor y como industria».