Sony despide a 900 empleados de la plantilla de PlayStation
La división de entretenimiento de Sony, Sony Interactive Entertainment, protagoniza un nuevo revés en la industria del videojuego, tras anunciar este mismo martes el despido de 900 empleados de PlayStation ante los "inmensos cambios" que está sufriendo el sector. Esto supone el cese de un 8% del conjunto de la plantilla, con el fin de disminuir gastos considerados superfluos y maximizar el rendimiento económico de la compañía en un nuevo enfoque. En su comunicado, la compañía con sede en California ha explicado que se trata de "una decisión extremadamente difícil" al afectar a "personas con un talento increíble que han formado parte de nuestros éxitos y a quienes estamos muy agradecidos".
Los despidos se llevarán a cabo en sus oficinas en todo el mundo, así como en los estudios, en base a la normativa laboral de cada país. El motivo de esta decisión, tal y como se explica en la nota, responde a la necesidad actual de la empresa de "dar un paso atrás" para entender cómo puede "responder a las expectativas de los desarrolladores y jugadores, y continuar propulsando la tecnología del futuro en los juegos". Llama la atención que la firma haya optado por poner en marcha tal medida en un momento en el que se está saboreando el gran éxito comercial por parte de la PlayStation 5, lo que podría indicar que las causas reales de estos ceses no vendrían motivadas como consecuencia de unos malos resultados.
Asimismo, en otro comunicado posterior emitido por parte de PlayStation Studios, se han especificado aquellos segmentos que se verán perjudicados por esta última tanda de despidos. Hermen Hulst, líder de PlayStation Studios, aclara que dichos recortes afectarán a Insomniac Games, Naughty Dog, Guerrilla y Firesprite, mientras que se reducirán también los empleados de Tecnología, Creativo y Soporte, y se cerrará por completo Studio London, el cual dejará de funcionar en su totalidad.
Lo cierto es que no es la primera vez que se han puesto las miradas sobre el cambio de rumbo que se estaba adoptando en PlayStation, tras el nuevo enfoque liderado por Jim Ryan, el cual no lograba ganarse la confianza ya no sólo de inversores, sino también de los usuarios que componen la comunidad en torno a este universo. Al final Ryan acabó apartándose, cediendo el protagonismo a los juegos como servicio y también a las superproducciones, y realizó el anuncio de su marcha , la cual vendría después de concluir el año fiscal, es decir, el próximo 31 de marzo. Un retiro que llegará tras formar parte de la compañía durante más de 30 años.
En cualquier caso, con este anuncio se confirma la situación tumultuosa que rige las compañías tecnológicas en general, y en concreto la industria del videojuego. Según datos aportados por el medio especializado Wired, el pasado año se produjeron 6.500 despidos en el sector de empresas como Amazon Games, Ubisoft o Epic Games, entre otros.
Wired subraya, además, diversos motivos que podrían estar originando dicha oleada de despidos. En concreto, apunta al crecimiento descontrolado que tuvo lugar durante la pandemia de la covid, a la irrupción de la inteligencia artificial (IA) así como a una mayor actividad sindical dentro de estas compañías.