La OTAN asegura que no tiene planes de enviar tropas de combate a Ucrania
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Algunos países miembros están sopesando el despliegue de efectivos de la Alianza Atlántica en Ucrania para ayudar al esfuerzo de guerra contra Rusia, dijo el primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico el pasado domingo. A las declaraciones del dirigente eslovaco se sumó un comentario del presidente de Francia, Emmanuel Macron, que encendió las alarmas entre los socios y también en Moscú. Macron manifestó el lunes que « no se debe excluir nada [en referencia a un eventual despliegue de soldados occidentales]. Haremos todo lo que sea necesario para que Rusia no gane». El mandatario francés hizo estas declaraciones durante una encuentro informal en Paris que reunió a una veintena de líderes, principalmente europeos, para discutir la asistencia a Kiev. Ninguno de los países occidentales, por el momento, ha realizado declaraciones que apoyen las palabras de Macron. Sin embargo, el primer ministro de Francia, Gabriel Attal, volvió a insistir el martes en que «no se puede descartar ninguna dinámica. Haremos todo lo que sea necesario para garantizar que Rusia no pueda ganar esta guerra». El propio Attal reconoció en la emisora gala RTL que no había consenso «sobre ningún despliegue oficial de fuerzas terrestres» en Ucrania. Las tensiones entre Rusia y la Alianza Atlántica, liderada por Estados Unidos, se han disparado desde el inicio de la invasión a gran escala de Ucrania en febrero de 2022 recordando a los momentos más críticos de la Guerra Fría. El mensaje de Macrón resonó lógicamente en Moscú. Desde Rusia se lazó una clara advertencia: si los miembros europeos de la Alianza despliegan sus soldados en el frente ucraniano, Rusia entrará en un conflicto directo con la OTAN . «En ese caso, no tendríamos que hablar de la probabilidad, sino de la inevitabilidad (de un conflicto directo)», dijo el portavoz de la presidencia rusa, Dmytri Peskov a los periodistas. Peskov subrayó la importancia de las palabras del líder galo señalando que «el hecho mismo de discutir la posibilidad de enviar ciertos contingentes a Ucrania desde los países de la OTAN es un elemento nuevo muy importante». Reacciones en Europa Las reacciones de los socios occidentales de Ucrania sobre las palabras de Macron fueron tajantes y negaron la posibilidad de fuerzas de la OTAN pudieran ingresar en Ucrania para participar en la guerra contra Rusia. El secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg declaró: «Los aliados de la OTAN están brindando un apoyo sin precedentes a Ucrania. Lo hemos hecho desde 2014 y hemos intensificado después de la invasión a gran escala. Pero no hay planes para enviar tropas de combate de la OTAN sobre el terreno en Ucrania». En este mismo sentido, un portavoz del primer ministro del Reino Unido, dijo que «más allá del pequeño número de personal que tenemos en el país para apoyar a las fuerzas armadas de Ucrania, no tenemos ningún plan para un despliegue a gran escala». Funcionario de Estados Unidos realizaron comentarios en el mismo sentido a la agencia Reuters. Suecia, Polonia, Hungría, República Checa, Eslovaquia y Alemania también descartaron públicamente que estén planteándose la posibilidad de enviar soldados a Ucrania. Dichos países aseguran que no existe tal consenso entre los socios. Por su parte el canciller alemán Olaf Scholz enfatizó que ese debate se planteó entre los socios y «lo que se acordó desde el principio entre nosotros también se aplica al futuro, es decir, que no habrá tropas terrestres ni soldados en suelo ucraniano enviados allí por los países europeos. o los estados de la OTAN».