Los periodistas sanitarios suspenden en transparencia al Ministerio de Sanidad
Los datos del IV Barómetro de Periodismo Sanitario de la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS) conceden un suspenso al Ministerio de Sanidad y a las consejerias en transparencia. El departamento que ahora dirige Mónica García consigue un aprobado raspado en cuanto a calidad de la información sanitaria suministrada, la eficacia de su gabinete y la disponibilidad de sus representantes para los medios.
Los periodistas especializados en salud participantes en el estudio también evaluaron la comunicación de instituciones y empresas del sector. En este sentido, los hospitales y clínicas alcanzan las mejores valoraciones, tanto en calidad de la información sanitaria, con 77 puntos sobre 100, como en la transparencia (62) y disponibilidad para los medios (67). Por lo que respecta a los gabinetes de las empresas farmacéuticas, suspenden en transparencia y calidad de la información (45) y aprueban en disponibilidad para los medios (59) y eficacia de sus gabinetes (60).
Estas son algunas de las conclusiones que se desprenden de la cuarta edición de este análisis, en el que han paricipado un total de 118 profesionales asociados a ANIS que desempeñan su labor en medios de comunicación y agencias de prensa (20%), gabinetes de prensa de instituciones o centros sanitarios públicos (18%), agencias de comunicación (17%), gabinetes de comunicación o marketing de farmacéuticas o fabricantes (15%), entre otros ámbitos. El 23,3% de ellos son autónomos o freelance, una tipología de trabajo que ha aumentado respecto al anterior estudio casi dos puntos porcentuales, y el porcentaje de profesionales especializados que trabajan de manera estable en medios de comunicación ha descendido del 24 en 2022 al 20% en 2023.
El 30% desea un cambio de trabajo
El 9% de los periodistas sanitarios cobra menos de 1.000 euros y el 15% dejaría la especialización, a pesar de considerar mayoritariamente que esta sigue siendo “una necesidad vigente hoy en día”. El descontento acerca de la retribución y las posibilidades de desarrollo profesional lleva a cerca del 30% a desear un cambio de trabajo, aunque obtiene las puntuaciones más alarmantes en el grupo de los periodistas especializados en salud que trabajan en medios de comunicación, que otorgan una nota de 6 a estas dimensiones, respectivamente.
A pesar de los recientes problemas sanitarios, sólo el 51% de los encuestados considera que la especialización en salud se ha potenciado en los últimos años y el 50,6% señala que el incremento de trabajo a partir de la pandemia mundial por COVID-19 no ha ido acompañado de una mejora de las condiciones, al contrario: el 14,6% incluso reporta una reducción de la retribución (el doble que en la anterior edición del Barómetro) y el 16% ha sufrido la pérdida de su trabajo (11 puntos por encima del dato del informe anterior).