A mí me vale
No hubo final feliz de San Valentín para la Real Sociedad y su gente. Era la Ciudad del Amor el escenario de un duelo de alturas, pero los locales contaban con un ‘ligón’ como Mbappé, asistido por las tácticas en forma de cobertura de Luis Enrique, y se llevaron el gato al agua los parisinos. Es una batalla lo que han ganado. Una que les posiciona con mucha ventaja para salir vencedores en la guerra, pero que no canten victoria aún. Desde luego, motivos para soñar hay, más allá del resultado.