Madrid es la tercera comunidad que recibe en fondos europeos, pero la última en reparto por habitante
Después de tres ejercicios completos de ejecución del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), el Gobierno ha logrado comprometer la mayoría de los fondos otorgados por la Unión Europea, a pesar de la ralentización observada en 2023. El Gobierno lleva comprometido a cierre del pasado ejercicio 66.296 millones de los 70.346 millones de euros recibidos, de los que 42.108 millones han sido ejecutados por la Administración General y 24.188 millones de euros por las comunidades autónomas, según apunta el último Observatorio NextGen de la consultora Llorente y Cuenca (LLYC).
Pese a que en 2021 el Gobierno central puso mucho énfasis en destacar el protagonismo que iban a tener las comunidades autónomas en la gestión de estos fondos europeos –la mayoría destinados a particulares y pymes, «dada la mayor cercanía de esta administración a las necesidades de la sociedad de cada territorio», apunta el informe–, la realidad ha sido otra, y los gobiernos regionales han recibido menos financiación que el Gobierno central. En concreto, la previsión había cifrado la ejecución de los fondos distribuidos en más del 40% de los recursos. Sin embargo, el ritmo de dichas transferencias ha ido decayendo en los sucesivos ejercicios y al final de 2023, con el 94% de los fondos iniciales ya comprometidos, se constata que el porcentaje que las autonomías están gestionando está cuatro puntos por debajo de la previsión inicial, situándose en el 36%.
La bajada en el ritmo de estas transferencias, y la correspondiente reducción de importes en cada semestre, no ha alterado demasiado el ranking de distribución del maná europeo. Así, Andalucía, Cataluña, Madrid y Comunidad Valencia son las regiones que han obtenido un mayor volumen de fondos. En conjunto han asumido el 50,76% del dinero total. Sin embargo, no puede decirse que sean las regiones más beneficiadas por el Plan de Recuperación, ya que si la distribución se realiza per cápita, es decir lo que le corresponde a cada habitante de esas regiones del total recibido, son las que menos importe han conseguido, invirtiéndose el orden por este concepto, y siendo la Comunidad de Madrid la más perjudicada, al obtener el último puesto del reparto per cápita, por debajo de todas autonomías, incluidas Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía, que le secundan en el vagón de cola de este reparto.
El caso de Madrid es especialmente significativo, ya que le han sido transferidos 2.607 millones de euros, lo que significa que cada uno de sus 6,86 millones de habitantes recibirá apenas 382 euros, mientras que un ceutí tendrá un reembolso de 1.298 euros y un melillense de 1.310 euros, los que más de toda España.
En el caso de Cataluña, la comunidad que preside Pere Aragonés recibirá 3.524 millones de euros, la segunda que más, lo que se traducirá en 457 euros per cápita. Andalucía, la que más recibe (3.849 millones) al ser la poblada del país, se resiente en distribución por habitante, pero aún así recibe más que Madrid, 451 euros. Incluso en la Comunidad Valenciana, que es la cuarta en recepción de dinero, la distribución por habitante se eleva a 448 euros.
A pesar de que estas cuatro regiones son las más densamente pobladas –juntas suponen casi el 60% de la población española–, no les ha valido para sacar mayor provecho por cada uno de sus ciudadanos, que reciben por debajo de la media. Baleares y Canarias están entre las mejor financiadas per cápita gracias factor de la insularidad, y todas las comunidades del interior (Castilla y León, Castilla-La Mancha, Aragón o La Rioja) se han beneficiado del factor de la despoblación y de la España vaciada. En el caso de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, la transferencia de recursos per cápita casi triplica la media general y son las más beneficiadas.