«Nuestra labor es poco conocida porque es confidencial y así debe ser»

Puedes ver los capítulos, tanto de esta tercera temporada, como de las anteriores, en este enlace - David, si hay una guerra, ¿tienes que ir obligatoriamente? - Buena pregunta, Clara. La verdad es que, si hay una guerra, depende de lo que el Gobierno decida respecto a cuánto nos tenemos que implicar en esa guerra o no y qué unidades vamos a mandar para allá. Si al final se decide que mandemos barcos y yo estoy destinado en uno de esos barcos, tengo el deber de ir. Para eso nos hemos ido preparando todos estos años. - ¿Qué consejos me darías si te digo que estoy pensando en ser militar como tú? ¿Y sabes que mi bisabuelo fue Coronel de la Legión en Melilla…? - ¡Ya decía yo que te notaba ahí algo que no sabía lo que era y ahora ya lo sé…! En cuanto a consejos, te diría tres cosas principales. La primera, estudiar. La segunda, hacer deporte. Y son muy importantes también las ganas. Tener ganas de llegar al objetivo que tú te marques. - David, ¿por qué crees que, en general, hay tanto desconocimiento sobre vuestra profesión? - Personalmente, creo que hasta cierto punto es hasta normal que no nos conozcan porque nuestra labor, por ejemplo, de los buques y unidades de la Armada, se desarrolla lejos de costa donde no se nos puede ver. Entonces, es difícil para el ciudadano de a pie conocer quiénes somos, qué es lo que hacemos y, realmente, qué le aportamos. Y, además, hay otra parte de nuestro trabajo diario que, a propósito, debemos llevar de forma discreta por la confidencialidad de la misión que estamos desempeñando y que es parte inherente, no solo de la Armada, sino también del resto de las Fuerzas Armadas. - ¿Es verdad que la nota de corte más exigente de todas es la de carrera militar? - El año pasado, en la convocatoria de acceso para oficiales, la nota de EBAU que se exigía como nota de corte estaba entre 12.5 y 13.3, lo que es una nota bastante exigente. - ¿Cuál es realmente el papel que tienen las mujeres en la Armada? - Pues realmente es un tema que está siempre de actualidad, pero que, afortunadamente, nosotros empezamos hace ya treinta años, a finales del siglo pasado, y en todos los ámbitos. Con lo cual es algo de lo que estar orgulloso porque de verdad que ha tenido una evolución muy positiva e importante. - Dime que las Fuerzas Armadas no funcionan como una ONG... - Efectivamente, no somos una ONG, pero, sin duda, todas aquellas funciones o cometidos en los que podemos ayudar, dependiendo de las circunstancias y en situaciones excepcionales en que la capacidad de atender la demanda de la sociedad se ve excedida, tratamos de echar una mano. Pero nuestro objetivo fundamental es defender la soberanía e independencia de España, la integridad territorial y el ordenamiento constitucional. Y eso es para lo que nos adiestramos, nos certificamos y llevamos al final a la práctica. - El mar siempre ha sido uno de los elementos más importantes en la historia de un país. ¿Cuál es la importancia que tiene a nivel de defensa y de seguridad en este momento? - Pues efectivamente, como bien dice, la importancia geoestratégica de la mar es enorme, y particularmente para España, tanto por su disposición geográfica como por nuestra propia historia. Un dato muy importante que siempre me ha llamado la atención es que, de nuestro perímetro nacional, el 80% es una frontera marítima. Eso significa que tenemos 6.000 kilómetros de costa donde se concentra prácticamente el 60% de la población. Y, es más, otro dato, quizás incluso más llamativo y muy poco conocido, es que la superficie marítima sobre la que España ejerce su soberanía y su jurisdicción es prácticamente el doble de nuestro territorio nacional. Es decir, tenemos 1,2 millones de kilómetros cuadrados que tenemos que proteger. Es tan territorio nacional la franja que va desde costa hacia las 12 millas mar adentro como la provincia de Cuenca. Y eso es algo que no todo el mundo tiene claro. - Yo creo que, tradicionalmente, la Armada ha tenido una relación muy fuerte con la Iglesia. ¿Cuál es el acompañamiento religioso que tenéis, la presencia de los capellanes en los barcos? - No siempre, pero muchas veces tenemos la oportunidad de que nos acompañe en estos despliegues algún capellán y él es parte de la dotación del barco a todos los efectos. Es decir, él tiene que vivir la dureza y la austeridad de la vida en la mar. Se integra con el grupo como uno más y, al final, creo que eso hace que se le dote de cierta confianza y de la potestad moral necesaria para que de verdad pueda ejercer como psicólogo, consejero e, incluso, como amigo en muchas ocasiones. - Aunque parezca mentira, todavía hay piratería en muchos lugares del mundo y España tiene una presencia cerca de Somalia: la Operación Atalanta. ¿Nos cuentas un poquito cómo es aquello? - Pues sí, María. Sigue habiendo piratas a día de hoy. De hecho, llevamos 14 años en la Operación Atalanta en toda la costa de Somalia tratando de paliar esa amenaza, que, aunque nos parezca muy lejana, puede afectar directamente a nuestras líneas de comunicación marítimas porque buena parte de todo el flujo de mercancías que se distribuye por vía marítima pasa por esa zona. - Me gustaría que me contaras si hoy volverías a elegir tu carrera militar dentro de la Armada y qué razones te impulsarían. - ¡Pues te diría que, sin ninguna duda, María! Estoy cerca ya de cumplir los 24 años al servicio de la Armada. Y en todos estos años, la verdad es que he tenido el privilegio de contribuir a la defensa nacional desde mi pequeña parcelita y he tenido la suerte de compartir mi carrera con personas realmente extraordinarias con las que me unen un vínculo importante y unos valores comunes. Y todo eso en una profesión que realmente me apasiona, que me plantea retos diarios y que, al final, me hace sentirme partícipe de un objetivo común y que de verdad creo que es más importante que todos y cada uno de nosotros por separado.