Rueda encara el «sprint» hacia su primera mayoría absoluta: «Somos el rival a batir»

En pos de su primera mayoría absoluta, para Alfonso Rueda arranca una quincena en la que no podrá guardarse ni una pizca de energía. Si el pasado fin de semana vació la cabeza de mítines, encuestas y expectativas electorales, con una exigente etapa ciclista entre Ponteareas y Tui, lo que hoy empieza tiene rango de gran vuelta. Dos semanas de máxima dureza, con más de 60 actos, de los más potentes en las ciudades a los guiños al rural. Y que este jueves por la tarde tuvo un aperitivo, a última hora de la tarde, en Lugo, donde el candidato del PPdeG recordó a los suyos que están ante el «sprint final»; y advirtió que, si bien ve al partido «superunido, supermovilizado y supermotivado», «no es suficiente», porque «no hay nada hecho». «Somos el rival a batir, van a ir a por nosotros», incluso con «malas artes», alertó. De regreso a la ciudad amurallada cinco días después de presentar el programa electoral —muestra elocuente de la relevancia de la provincia el 18F—, y ante 500 personas, Rueda aseguró ser «consciente» de la magnitud de lo que va a pedir estas dos semanas, una «enorme confianza», que se plasme en su primera mayoría absoluta, «siempre difícil, y mucho más en estos tiempos». Pero insistió en que no se presentan como «una hoja en blanco», como sus oponentes, que lanzan promesas en forma de «soluciones milagrosas». Ellos, al contrario, en las 870 medidas de su programa, que comparó con 870 apretones de mano con los gallegos, huyen de esas fórmulas, como han venido haciendo, y por eso quiere una campaña de exponer lo que se ha logrado y lo que se aspira a seguir consolidando y mejorando. «Todo lo hicimos sin renunciar nunca a los principios del partido: verdad, rigor y hablar con los gallegos cara a cara». El candidato conservador pidió a los suyos que no caigan en descalificaciones ni disparates. Está convencido de que Pedro Sánchez «no va a venir mucho» durante la campaña; y duda de la implicación de Yolanda Díaz. «Los que no van a venir son los socios del Bloque. Porque que vengan (…) Bildu y ERC, no les conviene y les da vergüenza hasta a los del Bloque, pero son sus socios», disparó. En cambio, reveló que habló la víspera con Mariano Rajoy, quien le dijo que «está deseando venir». Será el gran refuerzo junto a Alberto Núñez Feijóo. «Va a ser una campaña en la que vamos a disfrutar», aseguró, de «peinar el territorio» y exhibir músculo. Porque no quiere que «a Galicia venga lo que está pasando en el Gobierno de España». «No dejar que todo ese barullo, esos chantajes que estamos viendo, ese descontrol, ese desgobierno, ese no hacer nada nos lo traigan aquí también, corregido y aumentado», desgranó. «Simplemente por eso», por evitar que Sánchez implante una suerte de «sucursal» al servicio del nacionalismo, y de paso «dar en las narices» y «doblar el pulso» a Feijóo, «valdría la pena presentarse a las elecciones y ganarlas». A su equipo le pidió recorrer estas 15 etapas con «la cabeza muy alta y mucha potencia». Para coger el maillot de líderes y no soltarlo. «Galicia está rodando. Y si Galicia rueda, ¡es porque Galicia funciona!», arengó, parafraseando su lema electoral.