Los cinco más ricos del mundo ganaron 14 millones a la hora desde 2020
La riqueza de las cinco personas más ricas del mundo se ha duplicado desde el año 2020, pasando de 405.000 millones de dólares a 869.000 millones, lo que equivaldría a unos 14 millones por hora, mientras que la riqueza acumulada del 60% más pobre -casi 5.000 millones de personas- ha caído en el mismo periodo de tiempo. Así lo ha contabilizado Oxfam en su informe "Desigualdad S.A.", publicado con motivo del comienzo del Foro Económico Mundial, que reúne en la localidad suiza de Davos a líderes empresariales, políticos y académicos de numerosos países.
En él se pone de manifiesto que si se mantiene esta tendencia, “el mundo tendrá su primer billonario dentro de una década, aunque la pobreza no será erradicada hasta dentro de 229 años”. Según Oxfam, los cinco hombres más ricos del mundo son Elon Musk (Tesla y X, antiguo Twitter), Bernard Arnault (sector de artículos de lujo), Jeff Bezos (Amazon), Larry Ellison (del sector del software) y Warren Buffet (inversor americano). Todos ellos concentrados en el hemisferio norte, en el que se concentra el 69% de la riqueza mundial y el 74% de la riqueza milmillonaria del mundo, a pesar de que únicamente representan al 21% de la población mundial.
También asegura Oxfam que la propiedad de acciones “beneficia desproporcionadamente a los más ricos”, ya que el 1% que más posee dispone del 43% de los activos financieros globales. Este 1% cuenta con el 48% de la riqueza financiera en Oriente Medio; con el 50, en Asia; y con el 47%, en Europa. Así, la mayoría de las grandes corporaciones obtuvieron beneficios récord en 2023 y recuerda que 148 de las mayores compañías del mundo lograron unos beneficios netos conjuntos de 1,8 billones de dólares en los 12 meses previos a junio de 2023, lo que representa un aumento del 52% respecto al promedio de sus beneficios netos entre 2018 y 2021. El informe revela que por cada 100 dólares de beneficios generados por 96 grandes empresas entre julio de 2022 y junio de 2023, 82 dólares acabaron en manos de ricos accionistas.
Al mismo tiempo, el informe releva que por cada cien dólares de beneficios generados por 96 grandes empresas entre julio de 2022 y junio de 2023, 82 dólares acabaron en manos de ricos accionistas. En el otro lado de la balanza, se observa cómo los salarios de casi 800 millones de personas en 52 países no han podido seguir el ritmo de la inflación y han perdido 1,5 billones de dólares en los últimos dos años, lo que equivale a casi un mes (25 días) de salario perdido por cada trabajador. Además, siete de las diez empresas más grandes del mundo tiene a un multimillonario como presidente o accionista principal.
Ante estas profundas desigualdades la ONG reitera que es urgente una "acción pública transformadora capaz de dar prioridad a los servicios públicos, defender una mayor regulación de las grandes empresas, acabar con los monopolios y aplicar impuestos permanentes sobre la riqueza y los beneficios excesivos". Por ello, plantea “reformas fiscales que aseguren que las grandes fortunas y corporaciones tributen de manera justa a las ganancias que obtienen y sin eludir impuestos” y que los países “prioricen los servicios públicos, defiendan una mayor regulación de las grandes empresas, acaben con los monopolios y el excesivo poder de mercado y apliquen impuestos permanentes sobre la riqueza y los beneficios excesivos”.
El informe hace capítulo aparte con España para asegurar que el 53,8% del valor de la riqueza en España se concentró en 2022 en manos del 10% de la población, y un 22,4%, en las del 1% más rico, al tiempo que el 50% de los hogares más pobres apenas acapararon el 7,8% del total nacional y vieron reducida su riqueza neta promedio, según ha sostenido en el capítulo 'Desigualdad S.A., Filial en España'. El documento subraya que, en los últimos 20 años, la brecha entre una familia situada en el 50% más pobre y otra del 10% más acaudalado se ha duplicado. Estas dinámicas se habrían producido, explican desde la organización, "por el creciente porcentaje del PIB que suponen las rentas de capital, concentradas en unas pocas personas, frente a las rentas del trabajo".
A esta tendencia añade la evolución de la riqueza financiera, ya que el peso de los activos financieros sobre la riqueza bruta casi se ha doblado durante los últimos 20 años, y el 79,2% del valor de los mismos está en manos del 10% de las personas más acomodadas. Entre estas, Oxfam Intermón ha señalado que cerca de la mitad de las 50 grandes empresas españolas tienen una vinculación "significativa" con el 1% más pudiente vía propiedad de dichas compañías o por su presencia en los órganos directivos de los mismos, lo que "exacerba la desigualdad".
El texto destaca que los sueldos medios de los miembros del consejo de dirección del conjunto de grandes empresas analizadas aumentaron un 19% entre 2021 y 2022 y un 45% desde 2020, lo que contrasta con el hecho de que el salario medio de estas compañías subió un 8% en 2022 y un 9% en 2022. “En promedio, una persona trabajadora de estas empresas tardaría 91 años en ganar lo que el primer ejecutivo gana en un solo año”, recoge el informe. A su vez, se observa que las mujeres ganan en promedio un 15% menos que los hombres en estas empresas; mientras que la tendencia a reducir la presencia en “guaridas fiscales” se revirtió en 2022 y el "esfuerzo ambiental" continúan siendo “insuficiente y desigual”.
Finalmente, estiman que, a pesar del alza del 16% en las ganancias, estas grandes empresas apenas crearon un 0,1% más de empleos en 2022, en paralelo a un incremento de los sueldos medios de los miembros de los consejos de administración del 19% y a una revalorización del salario medio de sus trabajadores del 8%. En promedio, un empleado raso tardaría 91 años en ganar lo que el primer ejecutivo gana en un solo año.