Una exjugadora de baloncesto es destituida como embajadora de los Juegos Olímpicos de París por una publicación propalestina

La exjugadora de la selección francesa de baloncesto E milie Gomis ha sido destituida de su cargo de embajadora olímpica por una polémica relacionada con una publicación propalestina en las redes sociales acerca de la guerra de Gaza. El 9 de octubre, dos días después del ataque sorpresa de Hamás contra Israel, Gomis publicó una historia de Instagram en la que se veían mapas de Francia cubiertos gradualmente por la bandera de Israel acompañada de una pregunta que rezaba: «¿Qué harías tú en esta situación?». Los críticos han acusado a la exjugadora de baloncesto de antisemitismo y de apoyar el ataque de Hamás, algo que Gomis negó tajantemente. «Los miembros del Consejo de Administración y de la Asamblea General pudieron constatar que Emilie Gomis condenó los atentados del 7 de octubre en Israel y todas las formas de antisemitismo y discriminación , contrarias a sus valores», indió en un comunicado el comité de los Juegos Olímpicos de París 2024. «Emilie Gomis pidió disculpas por su publicación. Sin embargo, la Asamblea General (de París 2024) consideró que sus palabras contravenían su deber de neutralidad y ya no le permitían desempeñar sus funciones en París 2024 con ecuanimidad». La polémica en torno a Gomis, una atleta franco-senegalesa retirada que había jugado con Francia durante más de 10 años, ganando una Eurocopa en 2009, es el último asunto espinoso al que se enfrentan los Juegos, acosados ya por las tensiones geopolíticas de las guerras de Ucrania y Gaza. «Las acusaciones de antisemitismo a las que me enfrento están en total contradicción con los valores que me inculcaron y que el deporte me enseñó», declaró Gomis en un mensaje posterior en las redes sociales, en el que pedía disculpas a «quienes se hayan sentido heridos». Reuters no pudo ponerse en contacto inmediatamente con ella para que hiciera comentarios. París 2024 dijo que quería unos Juegos Olímpicos alegres y seguros para todos, pero a los organizadores les preocupa que el evento pueda quedar atrapado en la política en medio de las continuas guerras en Gaza y Ucrania y los propios desafíos de seguridad interna de Francia. «Es obvio que el contexto internacional es especialmente tenso hoy en día», declaró Estanguet el miércoles. Había llevado el caso Gomis ante el comité de ética, que el mes pasado declaró que el puesto de Gomis constituía «una violación grave... de las obligaciones éticas».