Descubrimiento sin precedentes: científicos revelaron el verdadero origen de la Luna, ¿cómo se formó?

Una investigación reveló que la creación del satélite podría estar bajo la Tierra.

Los orígenes de la Luna como satélite de la Tierra permanecen incógnitos. El astro se formó hace más de 4.460 millones de años y tiene efectos que permiten a los humanos habitar en el planeta.

Ahora, un estudio realizado por científicos de la Academia de Ciencias de China encontró anomalías sísmicas a 3.000 kilómetros bajo el suelo que podrían brindar datos clave sobre el cuerpo celeste.

El descubrimiento chino que revelaría el origen de la Luna

El Observatorio Astronómico de Shanghai (SHAO) de la Academia de Ciencias de China encontró dos enormes masas a 3.000 kilómetros bajo África occidental y el océano Pacífico.

Los geólogos denominan a estas formaciones como provincias de baja velocidad. El equipo de investigación descubrió que las anomalías podrían ser restos de una colisión que dataría de hace 4.500 millones de años que formó la Luna.

El estudio tomó como bases métodos computacionales de dinámica de fluidos y fue publicado en la prestigiosa revista Nature. El hallazgo ofrece nuevos conocimientos sobre la estructura interior de la Tierra y de su evolución a lo largo de la historia.

La teoría más reconocida sobre el origen de la Luna y el aporte de la investigación china

La teoría predominante sobre la creación del cuerpo celeste indica que en las últimas etapas de la creación del planeta Tierra se produjo una colisión masiva.

Este choque entre la Tierra primordial (Gaia) y un protoplaneta del tamaño aproximado de Marte (Theia) produjo residuos. Las simulaciones numéricas indican que la Luna heredó material de Theia.

Debido a que ambos planetas estaban conformados por materiales diferentes, la teoría sugiere que la Luna, que tenía como material predominante a Theia, debería tener una composición distinta a la Tierra.

Las mediciones realizadas por los científicos indican que el planeta en el que habitan los humanos y el satélite están compuestos por materiales similares, por lo que desafiaría a la teoría principal.

A través de un nuevo método de dinámica de fluidos computacional llamado Masa Finita sin Malla, los expertos realizaron nuevas simulaciones del impacto y descubrieron que la Tierra primitiva tenía estratificaciones del manto tras el impacto con composiciones y estados diversos.

El equipo encontró que la estratificación del manto podría haber resistido hasta el día de hoy, correspondientes a los reflectores sísmicos globales en el manto medio que se encuentran a 1.00 kilómetros bajo tierra.

Significa que todo el manto inferior podría estar dominado por el material gaiano anterior a la colisión, el cual tiene una composición elemental diferente con un mayor contenido de silicio que el superior.