El Supremo de Israel tumba una ley clave de la polémica reforma judicial de Netanyahu
El Tribunal Supremo israelí ha anunciado la anulación de una ley clave de la polémica reforma judicial que el Gobierno de Benjamín Netanyahu aprobó en julio. Esa norma quitó poder a la propia corte para revisar y revocar decisiones gubernamentales en base a si éstas era razonables o no. El Supremo respalda ahora la capacidad de los tribunales para intervenir y anular de forma excepcional y en casos extremos normas en las que la Knesset o Parlamento se exceda en su autoridad.
El tribunal, por una ajustada mayoría de ocho de quince jueces, ha informado de la derogación de la legislación que quitaba el poder a los tribunales al sostener que "causa un daño grave y sin precedentes a las características fundamentales de Israel como Estado democrático", dice en una sentencia hecha pública este lunes.
El fallo judicial es un golpe al plan de reforma de la coalición derechista de Netanyahu, que socava la división de poderes y la independencia de la Justicia en Israel, y que hasta el inicio de la guerra en Gaza llevó a masas de israelíes a la calle en un movimiento de protestas de dimensión histórica en el país.
La sentencia, que se hace pública mientras el país está inmerso en la guerra en Gaza, es considerada "histórica" y "controvertida" por la prensa israelí, ya que pone de nuevo sobre la mesa el asunto de la reforma judicial, que causó mucha polarización entre partidarios y opositores y agravó la división ya existente en el país, que ahora se había dejado de lado a raíz del esfuerzo bélico contra Hamás.
La decisión del Supremo es en respuesta a ocho recursos que habían presentado entidades como el Movimiento para un Gobierno de Calidad en Israel. Esto hizo que en septiembre se hiciera una audiencia con los 15 magistrados de la corte presentes para analizar las apelaciones contra la ley, que anulaba la llamada "doctrina de razonabilidad".
Tanto la aprobación de la propia legislación en julio como el día de la celebración de la audiencia en septiembre generaron grandes movilizaciones en Israel en favor de la intervención del tribunal para derogar la medida. Los contrarios a la reforma judicial se quejaban de que la ley otorgaba más poder al Ejecutivo en detrimento de la Justicia.
Miembros del Gobierno -el más derechista de la historia de Israel, formado también por fuerzas de ultraderecha- advirtieron en su momento que una decisión en contra de la norma por parte del Supremo pondría en jaque la democracia, y amenazaron con no acatar el fallo.
La ley en cuestión se aprobó como enmienda a una de las Leyes Básicas de Israel, normas fundamentales que rigen el Estado, que desde que se fundó en 1948 no tiene constitución. Es también la primera vez en la historia de Israel en que el Supremo ha intercedido ante una enmienda de una ley básica.