Humillación desde el gallinero
La primera vez que Pedro Sánchez fue humillado en su partido acabó de patitas en la calle. Fue el 1 de octubre de 2016, la noche de los cuchillos largos en la que sus compañeros lo echaron de Ferraz. De aquel escarnio público Sánchez salió gracias, en gran medida, a José Luis Ábalos: él recogió sus cenizas; él lo preparó para volver y ganar al aparato las primarias de la militancia; él le montó ese nuevo PSOE silente al servicio del líder; y él presentó la candidatura de Sánchez para la moción de censura a Rajoy. Читать дальше...