El truco de 1 € que la Guardia Civil usa en sus motos y puede salvar vidas en carretera
Qué es este pequeño dispositivo
Se trata de un silbato antianimales que se instala en la parte delantera de la moto, normalmente en la rejilla del radiador o en otro punto con buena exposición al aire. Tiene dos aberturas que generan un sonido de alta frecuencia cuando el vehículo circula por encima de los 50 km/h.
Este sonido es inaudible para el ser humano, pero sí lo perciben animales como ciervos, jabalíes o corzos, provocando que se alejen del entorno de la vía. El objetivo es que no crucen repentinamente la carretera, una de las causas más comunes de siniestros graves en moto.
Una solución adoptada por la Guardia Civil
La Dirección General de Tráfico ha alertado en varias ocasiones sobre el aumento de accidentes relacionados con fauna. En regiones como Castilla y León, más del 60 % de los siniestros en ciertas vías tienen que ver con animales salvajes.
Frente a esta situación, unidades de la Guardia Civil han empezado a usar este tipo de silbato en sus motos, destacando su bajo coste y alta funcionalidad. No se trata de una medida obligatoria, pero sí de una recomendación que se está extendiendo entre motoristas profesionales.
Cómo funciona exactamente
El silbato emite un sonido por el simple paso del aire a través de su estructura. No necesita pilas, batería ni mantenimiento. Al estar expuesto al viento frontal, genera una señal acústica constante a velocidades medias y altas, lo que permite mantener alejados a muchos animales antes de que entren en la calzada.
En rutas rurales, al amanecer o anochecer, su eficacia es especialmente notable, dado que es cuando la fauna silvestre está más activa.
En qué situaciones resulta más útil
- Carreteras convencionales con señalización de paso de animales.
- Zonas boscosas, rurales o montañosas.
- Circulación nocturna o en horas crepusculares.
- Viajes de largo recorrido por provincias con alta densidad de fauna.
Ventajas frente a otros sistemas
- Precio muy bajo: desde 1 € en packs múltiples.
- Instalación rápida sin herramientas especializadas.
- Compatible con motos, coches y vehículos agrícolas.
- No interfiere con la aerodinámica ni la visibilidad.
Limitaciones a tener en cuenta
Aunque eficaz, no es una solución infalible. Su efectividad depende del tipo de animal, su sensibilidad auditiva y otros factores ambientales. Además:
- No sustituye la necesidad de conducción prudente.
- Debe instalarse correctamente para emitir el sonido adecuado.
- No sirve para detener a un animal ya en carrera o en pánico.
Cómo instalarlo correctamente
La instalación es sencilla, pero debe hacerse con lógica:
- Colócalo en una zona frontal donde reciba flujo de aire directo.
- Evita zonas cubiertas o detrás de carenados.
- Asegúralo con cinta adhesiva resistente o bridas metálicas si es necesario.
- Verifica que no se desplace con la vibración o la velocidad.
Un aliado silencioso y eficaz
El silbato antianimales no pretende reemplazar ningún sistema de seguridad, pero sí complementarlo. Su efectividad radica en la anticipación: permite reducir el número de encuentros peligrosos con animales en carretera.
Su bajo coste y facilidad de instalación lo convierten en un recurso muy recomendable para cualquier motorista que frecuente zonas de riesgo. Por eso, su adopción por parte de la Guardia Civil refuerza su credibilidad como medida preventiva en entornos reales.
