Multinacionales esperan que un Milei más "fortalecido" acelere medidas
El día después de la arrasadora victoria de La Libertad Avanza en las elecciones legislativas fue todo euforia en los mercados financieros, con acciones que rebotaron más del 50% y el dólar que bajó alrededor de $ 100, pero en los despachos de los principales lobbistas hubo hiperactividad.
Alimenticias, laboratorios y mineras desempolvan una agenda de reformas sectoriales que esperan poder impulsar de la mano de un gobierno fortalecido en el Congreso a partir del 10 de diciembre. La expectativa es que haya cambios vía nuevas leyes o con decretos que ahora podrán ser defendidos porque se cuenta fácilmente con un tercio de diputados propios que blindan cualquier decisión.
Además, con el presidente Javier Milei en modo diálogo y por ahora hablando de buscar acuerdos con los gobernadores para avanzar en reformas en materia previsional, laboral e impositiva, como plantea el gobierno de Estados Unidos, se ilusionan con poder sumar agendas específicas de compañías que reclaman modificaciones en los marcos vigentes.
Con la ventaja de 10 puntos en las elecciones nacionales sobre el peronismo, y la ratificación del liderazgo del jefe de Estado pero sobre todo de su hermana Karina y el resto del equipo, lo primero que hay entre los ejecutivos es un entusiasmo a la espera de decisiones que eran inviables si la Casa Rosada estaba a la defensiva.
Entre los más envalentonados están, para empezar, los laboratorios internacionales, nucleados en su mayoría en la Cámara Argentina de Especialidades Medicinales, que tienen sobre la mesa la agenda del endurecimiento del sistema de patentes para fármacos de vanguardia.
Se trata de un tema que esperan poder empujar nada menos que de la mano de la embajada de EE.UU. y de la Cámara de Comercio Argentino Estadounidense. Es más, se trata de uno de los ítems que se juegan a que Washington ponga como condición para avanzar en la prolongación de los apoyos que llegan desde la Secretaría del Tesoro.
En especial, las multinacionales del "farma" americano promueven la derogación de los criterios de patentabilidad, una serie de requisitos que rigen en la Argentina para dificultar el registro de productos nuevos y permiten la competencia local.
"Los criterios de patentabilidad aplicados a las invenciones químico-farmacéuticas se apartan de los estándares internacionales y obstaculizan el lanzamiento de nuevas terapias en el país", detallan voceros al tanto.
La batalla que se viene ya puso en alerta a las farmacéuticas locales. La cámara de laboratorios nacionales CILFA preparó un informe titulado "Manipulando el sistema", con el detalle de siete estrategias de lo que llaman "evergreening", vericuetos legales para sostener la exclusividad en la producción monopólicas de drogas a lo largo del tiempo.
Por otro lado, una agenda paralela en materia de propiedad intelectual está vinculada con el agro y apunta a la derogación de la resolución 283 del 2015 del Instituto Nacional de Propiedad Industrial.
Según las empresas de semillas, con esa normativa se restringe la innovación y la incorporación de tecnología porque no se reconoce la patente sobre modificaciones genéticas de plantas ya existentes. "La actualización de las directrices de patentamiento permitirían fortalecer la inversión, mejorar la productividad y acelerar la incorporación de tecnología, siguiendo el ejemplo de países competidores como Brasil", explican los que presionan para esa definición. Existe un caso emblemático de Monsanto y Bayer con distintos litigios en la Justicia que se usa como caso testigo para este reclamo.
Por otra parte, con el espaldarazo electoral que recibió ayer el Presidente, las que vuelven a la carga son las multinacionales mineras, que están revisando todas las noches el Boletín Oficial desde hace meses a la espera de que modifiquen o deroguen directamente la ley de glaciares, último reclamo para avanzar con inversiones en yacimientos de cobre fundamentalmente.
Las empresas pretenden que se acote la definición del concepto de "zona periglaciar", que aparece en el segundo párrafo del artículo 2 de la ley 26.639 sancionada en 2010. Es el apartado que dice: "Se entiende por ambiente periglacial en la alta montaña, al área con suelos congelados que actúa como regulador del recurso hídrico. En la media y baja montaña al área que funciona como regulador de recursos hídricos con suelos saturados en hielo".
La queja que repite el sector es que esa definición deja abierta la puerta a que en cualquier momento del desarrollo de un proyecto minero que puede extenderse por décadas alguien puede presentarse y pedir en la Justicia que una determinada zona pase a ser considerada "periglaciar" y frene el negocio.
"Es ahora o nunca", se estremecía con cierto dramatismo post elección un referente del sector que siente que es el momento de ir por todo. Desde la ONG Greenpeace, donde hace sólo semanas hicieron una presentación sobre el eventual impacto de una modificación de este tipo, se preparan para la judicialización de la medida tanto en tribunales locales como internacionales.
La posición incluso pretende ir más allá y eventualmente poner en la mira cualquier proyecto minero aún por encima de lo que fijó la reglamentación de la ley original, que estableció un inventario de zonas a proteger a partir del tamaño de una hectárea, algo que en la institución ambientalista consideran arbitrario.
