Antonio López , gerente de bodegas El Monte: «Vamos a perder el 90% de la cosecha prevista este año»
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-La próxima vendimia se presenta con una cosecha bastante baja… -Yo estimo que la cosecha se ha podido reducir en general un 60 por ciento con respecto a lo que se esperaba. Se puede decir que de cada 10 viñas solo se salvan 3, que, no obstante, están también afectadas por el mildiu. -¿Por qué ha afectado este año tanto esta plaga a las plantaciones? -Hay que tener en primer lugar que los productos fitosanitarios que existen, que son los sistémicos, son caros. Asimismo, los viticultores no formamos parte de organizaciones como Greenpeace , pero sí intentamos por todos los medios ser lo más naturales posible. También es verdad que el mildiu se ha presentado este año de una forma muy agresiva por la mayor humedad que ha habido por las noches y es posible que la forma de hacerle frente no era con los tratamientos tradicionales. -¿Qué cosecha se espera en el caso concreto de Bodegas El Monte? -En nuestro caso estimamos que perderemos el 90 por ciento de la producción que teníamos prevista en nuestras 27 hectáreas de viñedo. Esperábamos llegar a 200.000 kilos de uva y nos vamos a quedar en alrededor de 15.000. -¿Qué supone esto para una firma como la suya? -Estamos intentando reorganizarnos. Estamos hablando con viticultores y cooperativas de la zona con menos daños para poder llegar a acuerdos que nos permitan salvar el año. Calculo que tardaremos en recuperarnos tres años desde el punto de vista económico. -Hay colectivos como Vitivinum que reclaman ayudas directas a la Junta y que no se abone la cuota correspondiente a 2025 al Consejo Regulador de Montilla-Moriles ante esta situación. ¿Cree que estas medidas están justificadas? -Entiendo que al delegado provincial de Agricultura, Francisco Acosta, no le hace falta que ningún colectivo presente una denuncia de una situación que es latente y que es muy similar a la que se está produciendo en zonas cercanas como es el caso de Huelva o Jerez . A la Junta hay que mandarle el mensaje claro de que la cosecha de uva este año en el conjunto de Andalucía se va a ver mermada de media en un 50 por ciento por una causa muy concreta, que es el mildiu. Se trata de un fenómeno meteorológico que puede considerarse como una catástrofe natural. En cuanto a la solicitud que se hace sobre no abonar las cuotas de este año al Consejo Regulador, opino que eso va más en contra de la operativa del órgano que de la situación económica que se le presenta a las bodegas dada la cosecha que se espera. Es necesario que el Consejo Regulador sea proactivo ante este escenario, pero hay que tener en cuenta que estas cosas son lentas. Tengo constancia de que ya hay conversaciones abiertas con el Gobierno andaluz . Si hay viticultores, pertenezcan o no a este colectivo, no están comunicando los daños sufridos en sus explotaciones, la Consejería no va a tener la información adecuada para presentarla ante la Junta. -La zona de Montilla-Moriles siguió perdiendo superficie el pasado año, una realidad que se mantiene desde hace mucho tiempo. ¿Se puede revertir esta tendencia? -Actualmente la zona está ya por debajo de las 4.000 hectáreas. Si llega el momento en el que bajemos de las 3.500 hectáreas, todo lo que no sea embotellado no será rentable. El principal damnificado de esta situación es el 'bag in box' un formato que está muy instaurado en la cultura de toda la provincia de Córdoba y que trabajan fundamentalmente las bodegas pequeñas y medianas, mientras que las grandes se mueven más en el ámbito de la alimentación. Además, la enorme burocracia que sufre el Consejo Regulador y que luego nos trasfiere a los bodegueros está llegando u unos niveles inasumibles. -¿Qué medidas se pueden adoptar frente a este problema? -Es una situación muy complicada. A día de hoy la viticultura es la labor en el campo que requiere más mano de obra y actualmente hay un enorme problema para encontrar trabajadores . Uno de los pocos aspectos positivos que vemos es la mayor tendencia al consumo de vinos blancos jóvenes, aunque esto requiere un mayor nivel de tecnificación de las bodegas que antes no existía.