Naturgy saca adelante su auto opa con la aceptación de más del 86% del capital y con sobredemanda
La opa formulada por Naturgy para situar su autocartera en el entorno del 10 % del capital ha sido aceptada por 837,50 millones de acciones, lo que representa un 86,37% del capital social de la empresa, con lo que supera con creces el límite máximo de la oferta. Los títulos se han distribuido entre sus aceptantes mediante la aplicación de las reglas de distribución y prorrateo establecidas en el folleto de la opa, según ha informado Naturgy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En concreto, el número total de aceptantes ha sido de 2.887 y a cada una de ellos se le ha adjudicado de forma lineal un número igual a 7.620 acciones, atendiéndose íntegramente las aceptaciones con un número de acciones inferior o igual al indicado. Por este concepto se han asignado un total de 2.227.550 acciones.
El número de acciones sobrante se ha distribuido de forma proporcional al número de acciones comprendidas en cada aceptación, resultando un coeficiente de prorrateo del 10,2687 %. En este caso se han asignado un total de 85.771.883 acciones. Según Naturgy, en el redondeo de las cifras resultantes se ha obtenido un número de acciones inferior al máximo de la oferta, aplicándose los restos uno a uno, empezando por el aceptante con mayor número de acciones ofrecidas sin adjudicar, hasta el total de 567 acciones.
A finales de marzo, Naturgy presentó la solicitud de autorización al a su oferta de adquisición voluntaria y parcial, cuya financiación por 2.332 millones de euros está avalada por CaixaBank, BBVA, BNP Paribas y Société Générale. En concreto, la oferta se dirigía a un máximo de 88 millones de sus propias acciones, representativas de un 9,08% de su capital social, con una contraprestación de 26,50 euros por acción, que han sido cubiertas.
El plazo de aceptación de la autoopa de Naturgy comenzó el pasado 30 de mayo, tras ser aprobado por el supervisor bursátil, y finalizó el 13 de junio. La oferta parcial preveía la adquisición de un número máximo de 88 millones de títulos de Naturgy, quedando excluidos los 8,8 millones de acciones propias que ya tiene en autocartera (0,916 % del capital social). Los accionistas significativos de la sociedad, con una participación igual o superior al 10% de su capital -Fundación La Caixa, CVC, BlackRock y IFM Global Infraestructure Fund- se habían comprometido a aceptar la oferta. Una vez finalizada la misma, la sociedad espera disponer de una posición financiera estable que le permita mantener su rating BBB e implementar el desarrollo de los proyectos previstos en su plan de negocios e incluso evaluar el posible desarrollo de nuevos proyectos.
Naturgy ha explicado que, tras la opa, el capital flotante en bolsa ("free float") solo ha bajado del 10 % al 9,6 %, mientras que la reducción de los accionistas de referencia ha sido muy superior, pasando del 85 al 76,2 %. La compañía dispone ahora de 96,9 millones de acciones en autocartera, un 10 % de su capital, después de invertir 2.332 millones de euros. "Este resultado facilitará alcanzar el objetivo de retornar a los principales índices bursátiles, como los de la familia MSCI, cuyo umbral mínimo de capital flotante se sitúa en el 15 %". La energética cree que el resultado de la OPA "evidencia que la compañía es un valor atractivo para fondos de inversión institucionales e inversores minoristas y que el Plan Estratégico 2025-2027, presentado en febrero, tiene la confianza del mercado".
En su folleto confirma que "no tiene previsto realizar ninguna reestructuración societaria de cualquier naturaleza" y, subraya que "no tiene previsto adoptar ni ha adoptado ninguna decisión relativa a la implementación del denominado Proyecto Géminis", que anunció en febrero de 2022 para escindir en dos la compañía -una parte con el negocio regulado y otra con el liberalizado-, pero que quedó definitivamente en el 'congelador'. El Plan Estratégico 2025-2027, aprobado en la junta general de accionistas, prevé un aumento de las inversiones orgánicas que rondará el 10%, con un total de 6.400 millones de euros, sin considerar potenciales oportunidades de crecimiento inorgánico. El 50% de dichas inversiones tiene como destino el negocio de Redes, y el 30%, el desarrollo de proyectos renovables (producción de biometano y generación eléctrica). España concentrará la mayoría de las inversiones.