‘Sublevados’, la vena franquista de México Republicano
México Republicano tiene una rama franquista. El proyecto político que coincide con el trumpismo de ultraderecha busca convertirse en partido político e incrustó en sus filas al fundador de la organización civilSublevados, que comulga con las ideas de Francisco Franco Bahamonde, dictador fascista de España entre 1939 y 1975.Pedro Cobo Pulido, director de la Fundación México Republicano y miembro del Comité Ejecutivo Nacional de esa agrupación, le dio vida a Sublevadosen enero de 2020. Todo inició con el reclutamiento de al menos 100 jóvenes de distintos estados del país para difundir, a través de redes sociales, el “ideario conservador”, la “defensa de la familia” y la “defensa de la vida”.Tanto Cobo Pulido como Sublevados también han hecho pública su simpatía por el creador y líder de la Falange Española, José Antonio Primo de Rivera (1903-1936), considerado el ideólogo del franquismo. Fue profesor de Estudios Internacionales en el ITAM y su tesis doctoral en Historia Contemporánea en la Universidad de Málaga llevó el título Representación familiar en la España de Franco (1945-1974).“Nunca salgas con una feminista. Son capaces de asesinar a su propio hijo”. “El feminismo es una grave enfermedad del alma”. “La mayoría de las feministas son feas. No es casualidad. Las guapas disfrutan en grado sumo los beneficios (desde Eva)”, anotó Cobo Pulido durante el mes de agosto en distintas publicaciones de su cuenta de la red social X.La organización tiene hoy más de 46 mil seguidores en esa red social, 4 mil en Facebook, 2 mil 600 en YouTube y poco más de mil en Instagram. Ahí también difunden propaganda de la extrema derecha española, incluidos a grupos profranquistas y profalangistas. En octubre de 2021 Sublevados anunció que su nuevo presidente sería Emilio Yitzhak.Desde esas plataformas, Sublevados promociona material que exalta a los presidentes y ex presidentes Donald Trump (Estados Unidos), Javier Milei (Argentina), Jair Bolsonaro (Brasil) o Nayib Bukele (El Salvador); mensajes religiosos de corte católico y cristiano; propuestas para la libre portación de armas de fuego, y la defensa de las corridas de toros.Pero también narrativas de odio en contra del feminismo, la diversidad sexual y el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo; manifestaciones de repudio al lenguaje ‘woke’ y a los “globalistas”, así como severas críticas a las principales cabezas del Partido Acción Nacional (PAN) por su “cobardía” de “no asumirse de derecha”.La idea de Cobo Pulido –oriundo de Muga de Sayago, municipio de Zamora, España– cuando formó esta organización mayoritariamente de jóvenes de entre 14 y 25 años, fue la de generar un “cambio cultural” en México. “Hasta ahora somos cien por 100 orgánicos. Como las plantas. Crecen de manera orgánica. Natural. Sí. Ya sé que suena a democracia orgánica. Franquismo. Pero en México esa palabra no tiene esa connotación”, dijo el hoy miembro de la dirigencia de México Republicano en junio de 2021 en una entrevista con el político catalán de derecha, Josep Maria Francás.Jean Carlo Portillo, abogado e influencer, así como Javier Zatarain, encargado de formación y capacitación de Acción Juvenil del PAN en Puebla, también son miembros de Sublevados. En sus redes sociales difunden el ideario conservador y narrativas de odio hacia el feminismo y la diversidad sexual. Cobo Pulido también planteó una agenda de 30 años para concretar un proyecto “conservador” en México y en América Latina. Un personaje recurrente que les sirve de ejemplo para alcanzar este objetivo es Santiago Abascal Conde, líder del partido ultraderechista español, Vox.Origen contrario a la RepúblicaSublevados, el 2 de enero colgó en su cuenta oficial de X, como mensaje de año nuevo, un video de Francisco Franco con un discurso de fondo del político falangista Blas Piñar López. En la pieza se escucha: “¡Adelante españoles! ¡Sin miedo a nada ni a nadie! ¡Por la fe y por la patria, las banderas en alto! ¡Viva Cristo Rey! ¡Arriba España! ¡Adelante España!”.Sublevados tomó su nombre prestado. Así se les llamó a los militares y organizaciones políticas de extrema derecha en España, también conocidas como “bando franquista” o “bando sublevado”, que se alzaron en golpe de Estado en 1936 contra la Segunda República. Este hecho derivó en la Guerra Civil Española; en el triunfo del frente fascista, con el apoyo de los nazis alemanes y los fascistas italianos, y en la dictadura de 36 años del general Francisco Franco.Además de este elemento franquista, México Republicano, el llamado proyecto trumpista en el país, tiene en su dirigencia nacional a personajes variopintos en el ámbito de la política mexicana.Estos van desde Lizzette Clavel Sánchez, ex senadora del PAN y ex diputada local del PT, quien funge en el cargo de secretaria de Comunicación; Raúl Ernesto Calleja, pastor evangelista de la Iglesia Resplandece, que aparece como coordinador de Asuntos Religiosos.También está el caso del presidente nacional de esa agrupación ultraconservadora, Juan Iván Peña Neder, ex asesor de la Secretaría de Gobernación en el sexenio de Felipe Calderón, ex dirigente del extinto partido Redes Sociales Progresistas (RSP) y quien además ha manifestado su afecto por los símbolos nazis.Sublevados y su fundador, quien es el presidente de la Fundación México Republicano y está incluido en la dirigencia nacional de esa organización política, han manifestado su simpatía con Eduardo Verástegui, el actor de extrema derecha que fracasó en su intento de convertirse en candidato independiente en la elección presidencial pasada por no reunir las firmas necesarias y por financiar sus actividades proselitistas con recursos del extranjero. En las ediciones de la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC) versión México, que organizó Verástegui Córdoba en 2022 y 2024, Sublevados tuvo su representación en la figura de Emilio Yitzhak. El activista se presenta en sus redes sociales como “cristiano, conservador y de derecha”. En 2021 tomó las riendas de esa agrupación en sustitución de Pedro Cobo. La ultraderecha mexicana busca asideros aquí y allá, del pasado y del presente. En la ruta para conseguir el registro como uno o varios partidos políticos, todavía no se define si llamarse “derecha”, “conservadurismo” o “derecha popular”. Incorpora ingredientes para nutrir su proyecto de nación, ya sea con Donald Trump, Jair Bolsonaro, El Yunque o el partido Vox. Y sí: también con ideologías tan polémicas como el franquismo o el falangismo.Fact checking: JRHIOGE