ru24.pro
World News
Январь
2025
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31

Montero, descabalgada de la sucesión

0

Sánchez tiene el control absoluto del PSOE andaluz. No es que no lo tuviese antes, es que no está dispuesto a ceder ni un milímetro de poder. De un plumazo, ha apartado de la carrera por su sucesión, a María Jesús Montero y, del mapa político, a Juan Espadas.

La misma operación la ha hecho en Castilla y León y en Madrid, solo falta por ver lo que ocurre finalmente en Aragón para despejar todo el mapa territorial.

La situación del líder socialista es comprometida, necesita el apoyo de Puigdemont y de ERC para aprobar los Presupuestos y eso le exige hacer nuevas concesiones al independentismo y no quiere ninguna voz discordante en el PSOE.

Aunque Espadas, Tudanca y Lobato han apoyado todas las decisiones de Sánchez, ley de Amnistía y cupo catalán incluidos, empezaban a tener contactos anticipatorios a una caída de Sánchez y eso es motivo suficiente para él.

Los territorios más dañados electoralmente por la entrega de concesiones al separatismo catalán son Madrid, Andalucía y las dos Castillas, precisamente, en donde ha intervenido para fidelizar al máximo su liderazgo. Solo queda la excepción de García Page, protegido por su mayoría absoluta.

Sánchez prefiere que no haya presidentes socialistas autonómicos, en tanto pueda mantener la silla en la Moncloa, porque sabe que un barón territorial con gobierno tiene poder social y no solo orgánico en el partido.

Por otra parte, Sánchez no deja que se puedan visualizar delfines, esa es una de las razones por las que sus equipos duran poco, algunos son lanzados hacia arriba, como Nadia Calviño, otras hacia abajo, como Montero, que ha visto como se desmoronan todas sus expectativas sin poder hacer nada que lo evite.

Los siguientes en caer del gobierno serán Félix Bolaños y Óscar Puente, ambos trabajan su imagen para ser recambios, Sánchez lo sabe, está por ver si los despedirá con una patada hacia arriba o con cajas destempladas hacia la puerta de salida.

El resultado final es una organización desmembrada, colonizada, más presidencialista y sometida a continua tensión de polarización, dejando sin hueco al debate interno. Es indiferente las políticas practicadas por el líder socialista o sus cambios de opinión según lo que sirva a sus intereses en cada momento, quien no se adhiera inquebrantablemente, será acusado de traición a la causa socialista.

En el PSOE de Sánchez los dirigentes viven pegados al wasap para recibir instrucciones, han entregado el pensamiento crítico y el derecho a intervenir en el debate político.