ru24.pro
World News
Январь
2025
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31

El estadio de Rapanui costará u$s 20 M y su dueño quiere crear una liga de hockey sobre hielo

0

Pocos días después de confirmar que, finalmente y luego de 30 años, construirá un microestadio de patinaje y hockey sobre hielo, Diego Fenoglio, dueño de Rapanui, ya compró el terreno en el que emplazará la estructura de sus sueños. Cuando esté terminado, en cuatro años, el chocolatero proyecta  mudar las oficinas de su empresa a ese edificio, en el que habrá departamentos. El proyecto demandará una inversión cercana a los u$s 20 millones y será clave para concretar otro deseo personal: la creación de una liga de hockey sobre hielo en Bariloche. 

 "Es un proyecto ambicioso", dijo Fenoglio a El Cronista. Reiteró, como lo había hecho en el podcast La Fábrica durante el fin de semana, que, que, si bien era un viejo sueño, en su lista de pendientes hace más de 30 años, la estabilidad macroeconómica que se logró en el primer año de mandado de Javier Milei lo hizo tomar la decisión de avanzar con su proyecto.

El terreno comprado tiene una extensión de alrededor de casi una hectárea, 8000 metros cuadrados (m2). El proyecto del microestadio tendrá 140 metros de largo por 60 de ancho, ya que albergará dos pistas de hielo olímpicas (una para hockey y la otra, para patín artístico).

Fenoglio proyecta finalizarlo en cuatro años. Los planos, dijo, ya están en una etapa avanzada pero aún restan habilitaciones y aprobaciones gubernamentales.

"En los últimos 20 años, la Argentina fue de mal en peor. Después del primer año del gobierno de Milei, estamos viendo las condiciones necesarias para que el país vuelva a crecer, así como los empresarios a invertir. Consideré que era el momento adecuado", indicó.

Su idea es, en un principio, promover ambos deportes en la ciudad patagónica para, luego, crear una liga de hockey sobre hielo y un equipo de patinaje artístico. "Armamos un estadio con capacidad para 4000 personas para darles una alternativa a los turistas que visitan Bariloche. Queremos que vayan a ver los partidos", aseguró.

Para eso, el chocolatero ya planea contratar entrenadores de Canadá e Italia. De hecho, el estadio contará con ocho departamentos, que serán utilizados para albergar tanto a coaches, como a jugadores internacionales que deseen practicar el deporte en el estadio patagónico. El complejo también albergará a las nuevas oficinas de Rapanui en Bariloche.

Fenoglio ya tuvo un intento de construir un proyecto similar al actual. Se llamó Castillo de Hielo. Aquel estaba pensado para albergar a unas 2500 personas y solo contemplaba la construcción de una pista, de dimensiones más pequeñas.

Sin embargo, el proyecto no prosperó por falta de habilitación municipal. "Hace 30 años, le presenté un proyecto a la Municipalidad de Bariloche para armar un proyecto similar. Pero, para que el negocio fuera rentable, necesitaba que tuviera 1800 butacas, cuando el límite era 1600. Pedí una excepción y no la conseguí. Entonces, lo suspendí, a la espera de una nueva oportunidad", contó.

El plan del microestadio es más antiguo que la creación de Franui, su afamada marca de frambuesas bañadas en chocolate, que nació en 2013.

Rapanui nació a partir de la historia de una familia italiana. Durante gran parte de su vida, Aldo Fenoglio, padre de Diego, tuvo un negocio dedicado a la producción de finas exquisiteces, como trufas y bombones, una costumbre de sus ancestros que se transmitió de generación en generación.

Desembarcó en la Argentina cuando debió abandonar Turín, su tierra natal, y emigrar ante el estallido de la Segunda Guerra Mundial. Junto a su mujer, Inés, el europeo fundó en 1948 Tronador, la primera chocolatería y heladería artesanal de Bariloche, que más tarde pasó a llamarse Chocolates Fenoglio.

En 1996, Diego dio lugar a Rapanui, un negocio que continúa el legado familiar, con un local en la calle Mitre 202 en Bariloche, uno en la base del Cerro Catedral y otro en el aeropuerto de esa ciudad. Hoy, con casi 30 años en el mercado, la heladería tiene más de una docena de locales propios en la Argentina -gestionados por la misma empresa- y su producto insignia, el Franui, se consigue en más de 25 países del mundo, incluyendo destinos exóticos como Moldavia y Rumania.

"Fenoglio fue la empresa familiar fundada por mi padre en 1948. Al fallecer, mi madre, mi hermana y yo quedamos a cargo de ella. En 1995, les vendí mi parte y un año más tarde fundé Rapanui porque quería cambiar el modelo. Tiempo después, Fenoglio se vendió (N.d.R.: a Havanna) pero siempre nos mantuvimos en buenos términos", indicó el empresario, quien maneja el negocio junto a sus hijos, Aldo y Leticia.