Así está la actuación en las tres travesías de la N-502 en Los Pedroches

Las obras de en las travesías de la carretera nacional N-502 (que une Córdoba con Ávila) en los pueblos de Los Pedroches de El Viso, Santa Eufemia y Alcaracejos, avanzan con más pausa que prisa. Así se desprende de una respuesta del Gobierno a los senadores populares Cristina Casanueva, Lorena Guerra y Fernando Priego, en la que avanza las actuaciones llevadas a cabo. Según consta en el escrito, lo que se ha hecho hasta el momento ha sido «en la travesía de Alcaracejos , en una zona de unos 350 metros de longitud, se ha rebajado la rasante de la carretera, con el objetivo de que esta tenga una cota inferior al a de entrada a las viviendas, y se ha ampliado la anchura de las aceras en ambas márgenes». Las siguientes intervenciones (todas con el objetivo de lograr el 'calmado del tráfico' y la organización de la movilidad peatonal) consistirán en el pintado de 'dientes de dragón' en la entrada de las travesías, reducción de anchura de los carriles, especialmente en las inmediaciones de los pasos de peatones, y refuerzo de la señalización vertical. Además, se insalarán barandillas de separación entre calzada y aceras para «conducir a los peatones que quieran cruzar a los pasos habilitados». También se pretende disminuir el rudio generado por el tráfico «sustituyendo la capa de rodadura de aglomerado existente por una con características fonoabsorbentes», recoge la respuesta gubernamental. En concreto, estas actuaciones se llevarán a cabo entre el kilómetro 339,365 y el 340,097, con una longitud prevista de 732 metros, en Santa Eufemia; entre el kilómetro 352,790 y el 354,510, con una longitud prevista de 1.720 metros, en El Viso; y entre el kilómetro 364,195 y el 365,615, con una longitud prevista de 1.420 metros, en Alcaracejos. Esta intervención menor no deja de ser un 'parche' a la esperada construcción de las variantes de esta carretera nacional, la única de Córdoba que atraviesa cascos urbanos, sin ofrecer una alternativa y con las consecuentes molestias para los residentes de los municipios afectados. Han sido varias las ocasiones en las que estas variantes han superado trámites administrativos; incluso, han llegado a adjudicarse, pero, finalmente, los proyectos han quedado en papel mojado .