Elegir la manera de perder
La derrota siempre duele, pero es sano aprender a convivir con ella. La mayoría de nosotros perdemos más que ganamos, por lo que es necesario aceptarla como compañera de viaje. En cambio, la victoria parece que avala todos los caminos. Pocas culturas reflexionan sobre cómo llegan porque la sociedad sobrevalora el éxito. Ganar parece sinónimo de hacer bien las cosas, algo muy discutible.