La Guardia Civil advierte de lo que no debemos hacer nunca con las cajas que recibimos en Navidad: la mayoría lo hace
0
Con la llegada de la Navidad, las casas se llenan de paquetes que van y vienen llenos. Sin embargo, a la hora de desecharlos hay un detalle al que pocos prestan atención: las etiquetas. Tirar una caja con información personal puede convertirse en la puerta de entrada para problemas mucho más serios, como la suplantación de identidad. En este sentido, la Guardia Civil ha lanzado un recordatorio urgente: antes de desechar cualquier paquete, asegúrate de eliminar o destruir las etiquetas que contengan información personal. Muchas veces, estas etiquetas incluyen nombres, direcciones e incluso números de contacto, detalles que pueden caer en manos equivocadas y ser utilizados con fines delictivos. Para evitarlo, los expertos recomiendan métodos sencillos como utilizar un poco de gel hidroalcohólico para borrar la tinta de las etiquetas, una solución accesible que cualquiera puede aplicar en casa. Otra alternativa es cortar o romper directamente las etiquetas, asegurándote de que los datos no puedan ser leídos o recuperados. Una de las técnicas más utilizadas por los delincuentes para obtener información personal es el conocido como 'dumpster diving' que consiste en rebuscar en la basura de particulares o empresas en busca de documentos desechados sin las debidas precauciones. Facturas, extractos bancarios, cartas y otros papeles pueden convertirse en un tesoro para quienes buscan datos que les permitan cometer fraudes o suplantaciones de identidad. Por eso, es esencial triturar o destruir cualquier documento que contenga información sensible antes de tirarlo. Sin embargo, cabe destacar que el phishing sigue siendo la estrategia más común para robar datos personales. En este caso, los delincuentes envían correos electrónicos o mensajes que simulan ser de empresas confiables, como bancos o servicios de paquetería, pidiendo información confidencial. El consejo principal es desconfiar de cualquier solicitud que pida datos sensibles y, en caso de duda, contactar directamente a la entidad en cuestión para verificar su autenticidad.