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Fusión de Nissan y Honda: las claves para ser un gigante de la automoción

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Abc.es 
Grandes marcas automovilísticas están perdiendo terreno ante la dura competencia en el sector de vehículos eléctricos de China, que superó en 2023 a Japón como principal exportador de vehículos del mundo. El proceso de electrificación, las inversiones realizadas y el escaso éxito de ventas de los vehículos 100% eléctricos está detrás de importantes movimientos a nivel global. Los principales grupos mueven ficha para recuperar su posición en el mercado y, sobre todo, su rentabilidad. En medio de este proceso, una de las compañías afectadas ha sido la japonesa Nissan, que hace un mes anunció la supresión de 9.000 puestos de trabajo en el mundo, un recorte de sus previsiones de ventas y la reducción de un 20% de sus capacidades de producción. En ese momento ya surgieron rumores acerca de un posible rescate por parte de alguna otra compañía japonesa, que se han confirmado el pasado miércoles. Los diarios económicos Nikkei y Financial Times, entre otros, apuntaron el que los dos gigantes del motor japoneses están en conversaciones preliminares para una posible fusión. Y a continuación un portavoz de Honda confirmó la posibilidad de una fusión con su rival Nissan pero subrayó que «nada está decidido». Según estos medios, con una fusión podrían competir mejor en este sector con Tesla o las marcas chinas. Desde Nissan señalaron que «el contenido de estas informaciones no es algo que hayan anunciado ninguna de las compañías», para a continuación aclarar que «como anunciamos en marzo, Honda y Nissan estamos explorando varias posibilidades de futura colaboración, sacando ventaja de las fortalezas de cada una. Si hay alguna novedad, informaremos a los accionistas a su debido tiempo». Según el diario Nikkei, un tercer interesado en entrar en el accionariado de Nissan es el fabricante de teléfonos móviles taiwanés Hon Hai Precision Industry, una empresa conocida como Foxconn dedicada fundamentalmente a ensamblar productos de Apple. Tendría como objetivo conseguir una cuota de mercado mundial del 40% en coches eléctricos. Hasta el momento, ni Foxconn ni Nissan han emitido comentarios oficiales ni confirmaciones acerca de esta posible negociación. Entre las claves de esta posible fusión destaca que tanto Nissan como Honda han invertido fuertemente en el desarrollo de vehículos eléctricos, pero aún no han logrado alcanzar el mismo nivel de dominio que Tesla o algunos fabricantes chinos. La unión de fuerzas permitiría acelerar el desarrollo de nuevas tecnologías y ampliar su oferta de modelos eléctricos. Al unir sus operaciones ambas compañías podrían reducir costes en áreas como investigación y desarrollo, producción y logística, lo que les permitiría ser más competitivos en términos de precios. Y además, fruto de esta posible fusión, se crearía un nuevo gigante automotriz que tendría mayor poder de negociación con proveedores y distribuidores, lo que podría traducirse en mejores condiciones comerciales. La hoja de ruta de esta posible fusión no es nueva. Ya a finales de 2024, tanto Nissan como Honda anunciaron públicamente que estaban explorando opciones para una posible fusión. Ambas empresas han estado llevando a cabo negociaciones para definir los términos de la fusión, como la estructura de la nueva compañía, la distribución de acciones y los planes de inversión. Y un tercer componente sería otra importante marca japonesa, ya que Mitsubishi Motors, en la que Nissan tiene una participación significativa, se podría unir a la nueva entidad. En la actualidad y desde el año 1999 Nissan mantiene una alianza con Renault y Mitsubishi. Se trata de una estructura de propiedad cruzada. Esto significa que cada empresa posee una participación accionaria significativa en las otras dos, lo que crea una interdependencia y un fuerte vínculo entre ellas. Renault es el primer accionista de Nissan con una participación del 35,7%, pero Renault ha manifestado su intención de reducir su porcentaje en el capital de Nissan. Ambos grupos han manifestado su intención de conservar una participación cruzada del 15%. Cada marca (Renault, Nissan y Mitsubishi) conserva su propia identidad y se enfoca en diferentes segmentos del mercado.