El Gobierno quiere ahora enviar al Rey u otro alto cargo a las tomas de posesión de los presidentes africanos
El Gobierno pretende ahora enviar al Rey Felipe VI o a algún otro alto cargo a las tomas de posesión de los presidentes africanos en el marco de los esfuerzos para reforzar la interlocución a nivel político con África. Una idea que forma parte de la Estrategia España-África 2025-2028, presentada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en Moncloa el pasado jueves. Un plan que incluye un centenar de medidas con las que se busca iniciar "una nueva era" en la relación, "de igual a igual", según indicó.
Su objetivo es reforzar la interacción con los países africanos, en particular con los de África Occidental y el Norte de África. Y para ello, el Ejecutivo se compromete a velar "por una adecuada representación española en las ceremonias de toma de posesión de líderes electos africanos, a través de la presencia del Rey, o de la Presidencia del Congreso o del Senado, de ministros o secretarios de Estado, en función del caso".
Por regla general, la representación del Estado en las tomas de posesión de mandatarios suele recaer en el embajador, si es que se cuenta con legación diplomática en el país, en la mayoría de los casos en los que se decide asistir o hay invitación expresa para ello por parte de las autoridades del país anfitrión.
La salvedad la constituyen los países de Iberoámerica. Aquí, dada la relación histórica, la representación es al más alto nivel y es Felipe VI quien acude a todas las tomas de posesión, si bien ha habido alguna excepción muy puntual. Ya con anterioridad, cuando era Príncipe de Asturias, era él el encargado de representar a España.
Cumbres con más países
Por otra parte, la estrategia también plantea "ampliar la celebración de reuniones de alto nivel (RAN) a nuevos países africanos con los que la densidad de intereses y oportunidades compartidos así lo aconseje". Actualmente, estas cumbres bilaterales solo se celebran con países con los que España tiene una relación muy estrecha, sobre todo europeos.
En el continente, solo se celebraban hasta ahora con Marruecos, Argelia y Túnez pero está previsto que se sume próximamente Mauritania, según anunció Sánchez durante la visita que realizó a este país a finales de agosto.
Asimismo, el Gobierno también prevé "la apertura de nuevas embajadas, la creación de nuevas antenas diplomáticas y nuevas oficinas sectoriales, incluyendo de la Cooperación Española".
En otro orden de cosas, el Ministerio de Exteriores procederá a constituir "una Comisión Interministerial para África que se reunirá semestralmente a nivel de ministros" y "trimestralmente a nivel de secretarios de Estado", presidida en ambos casos por el representante de Exteriores. Esta comisión será la encargada de dar seguimiento a la ejecución de la estrategia.
Además, dentro de Exteriores, se establecerá un Consejo Asesor "integrado por personalidades africanas de reconocido prestigio procedentes de los sectores profesionales más amplios y con representación de todas las áreas culturales, geográficas y lingüísticas de especial interés para España". Este consejo se reunirá anualmente y transmitirá "expectativas y demandas".
Igualmente, se procederá a crear una Subdirección General para África Occidental y el Sahel dentro de la Dirección General para África, dada la prioridad especial que se da a esta zona dentro del continente.