Banda de estafadores habría sustraído ¢2.000 millones a víctimas en siete años
Una organización dedicada a estafas informáticas habría sustraído hasta ¢2.000 millones a sus víctimas en los últimos siete años, según informó este miércoles el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), mientras se desarrollaban ocho allanamientos en San José, Alajuela y Cartago, para detener a los sospechosos.
Randall Zúñiga, director de la Policía Judicial, precisó que el objetivo de los operativos era capturar a 18 personas, que operaban bajo el método del falso empleado bancario para sustraer el dinero de las cuentas de ahorros de sus objetivos. El grupo es liderado por un sujeto de apellido Tencio, que está recluido en Máxima Seguridad del Centro de Atención Integral Jorge Arturo Montero Castro (La Reforma), donde descuenta 35 años de prisión por tentativa de homicidio y robo.
Este sujeto, que tiene un juicio pendiente por estafa, era quien enviaba indicaciones a sus empleados mediante sistemas de mensajería, desde distintos celulares que burlaban los sistemas de bloqueo de la penitenciaría.
Los allanamientos, ejecutados por fiscales y agentes de la Sección Especializada Contra el Fraude Informático del OIJ, ocurrieron en La Sabana, en San José; así como Guatuso, Aguas Zarcas y La Reforma, en Alajuela, y en Cartago y están relacionados con siete causas donde el perjuicio económico asciende a ¢125 millones. Sin embargo, Zúñiga sostuvo que el grupo opera desde el 2017 y que, desde entonces, el monto de lo sustraído podría alcanzar los ¢2.000 millones antes mencionados.
En La Sabana operaba un call center desde donde llamaban a sus víctimas. Al momento del ingreso, había 25 personas, que también fueron detenidas, agregó Zúñiga. En el timo del falso empleado bancario, los estafadores le hacen creer a sus objetivos que un tercero está a punto de sustraerles dinero. Por esa razón, le piden a la víctima que entre a un enlace fraudulento o brinde datos confidenciales y así tener acceso a cuentas bancarias y ahorros.
Se presume que este grupo contaba con aliados que prestaban sus cuentas de banco para depositar allí el dinero sustraído.
Zúñiga también indicó que los estafadores cambiaban de sede aproximadamente cada cuatro meses, para distraer los esfuerzos policiales.
Durante el 2023 y los primeros siete meses del 2024, el Ministerio Público recibió 4.776 denuncias por estafas informáticas en San José. Estas denuncias representaron un perjuicio económico de ¢5.219 millones y $3,3 millones, lo que equivale a unos ¢7.000 millones.
Según datos del Ministerio Público, el 89% de estas denuncias se concentró en cuatro entidades: el Banco Nacional de Costa Rica (BNCR), el Banco de Costa Rica (BCR), BAC Credomatic y el Banco Popular.
Cuatro bancos concentran denuncias por estafas informáticas en San José