Los mejores sitios cerca de Madrid para coger setas: dónde están y qué variedades hay
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La estación del año en la que nos encontramos, el otoño , es el mejor momento para realizar algunos planes concretos como pueden ser comer castañas asadas, ir de senderismo o recolectar setas. Esta última actividad suele realizarse de manera recreativa aunque, muchas personas, también se fían de su criterio y experiencia y recolectan este alimento con el objetivo de degustarlas. Dando por hecho que cualquier seta puede ser peligrosa y resultar tóxica o incluso mortal, la mejor opción es que las recojas pero no las pruebes a no ser que estés completamente seguro de que esa seta es comestible o que, al menos, no te va a provocar una intoxicación. En Madrid, concretamente en la zona de la sierra, el clima y las condiciones geográficas hacen que se trate de un escenario apto para que crezcan setas y hongos . A continuación te contamos cuáles son algunos de los mejores lugares para coger setas en Madrid y qué tipo puedes encontrar. La Alameda del Valle, el Monasterio de Paular, el Puerto de Cotos, el Puerto de Canencia o el Puerto de los Leones son algunos de los puntos de la sierra de Madrid en los que puedes encontrar especies micológicas como níscalos, setas de cardo, boletus edulis, champiñones silvestres, perrechicos o senderuelas, entre otras. Ubicado dentro de la Sierra del Rincón, en esta zona se encuentra sobre todo la seta senderuela , llamada Marasmius Oreades, y destaca por ser pequeña y con un sombrero achatado. Aunque en menos cantidad, también hay hongos blancos y níscalos. A medio camino entre Segovia y la Comunidad de Madrid, esta zona de monte se vuelve de las más húmedas y frías, unas condiciones ideales para el crecimiento de varios tipos de setas. Entre ellas destaca la presencia de los níscalos y los hongos blancos , que crecen cerca de pinares y bosques mixtos. A su vez, puede que te encuentres con algunas setas de cardo en las partes más despejadas. Esta zona natural madrileña se encuentra junto al curso medio del río Manzanares y, la humedad del terreno, permite encontrar setas como la s de cardo y el champiñón silvestre , propias de zonas sin árboles. Si nos adentramos donde hay bosque será fácil toparnos con níscalos cerca de los grupos de pinos. Además de estas consideraciones, también debemos tener claro que las setas se recogen en cestas de mimbre , rafia o en algún recipiente con agujeros o rejilla. El objetivo es que las esporas de las setas se sigan extendiendo una vez recogidas para que puedan seguir creciendo. Si las llevas, por ejemplo, en una bolsa de plástico, impediremos este proceso y no saldrán más hongos en la zona intervenida.