Superpatata llega a Toledo de la mano de Artur Laperla y de CiBRA
0
¿Se imaginan que el superhéroe más repeinado, cachas y justiciero de la galaxia se convirtiera en una patata? Eso es lo que le hizo el maléfico Doctor Malévolo a Supermax, ahora Superpatata, personaje de cómic creado por Artur Laperla (Barcelona, 1975) que triunfa entre los más pequeños 'desfaciendo' entuertos como Don Quijote de La Mancha. Artur Laperla es dibujante y guionista de cómics tanto para adultos como para niños, pero es en esta última faceta en la que ha destacado gracias a su famoso personaje, Superpatata, protagonista de una serie que va ya por su décimo tercer número. Creada en 2011, cada año su autor ha ido sacando un nuevo episodio de este superhéroe tan particular que tiene encandilado a niños e incluso mayores, que ven en él un personaje paródico, pues es difícil imaginar que una patata sea capaz de salvar el mundo. De hecho, tal es la repercusión de sus cómics, que de algunos de ellos se han hecho adaptaciones para el mundo audiovisual. Es por ello que el ilustrador es uno de los invitados de la edición de este año del Festival del Cine y la Palabra (CiBRA) , que reúne un año más en Toledo a algunos de los más grandes representantes y creadores de este sector. El creador de Superpatata cree que la adaptación audiovisual de un cómic es «complicada porque no depende tanto del autor, sino de otros factores, sobre todo del económico». De hecho, informa de que los derechos para que su superhéroe llegue a las pantallas pasan por muchas manos y está peleando con la burocracia, como si de otro villano de sus aventuras se tratara, para que verlo animado sea una realidad. Hasta Toledo llegará este domingo, a las 12.00 horas, para ofrecer una charla y un taller para familias en la librería toledana La Madriguera de Papel , en el barrio de Valparaíso, en donde hablará de su experiencia y de su forma de trabajar. Artur Laperla cuenta a ABC que él siempre quiso hacer cómics, desde pequeño, pero no fue hasta más adelante cuando comenzó a crear sus historias. De hecho, recuerda que estudió dos años de la carrera universitaria de Filosofía, pero luego lo dejó e hizo un módulo de ilustración, algo que cambió su vida. El ilustrador aprovechará esta ocasión para aconsejar a los niños que se acerquen al taller, interesados muchos de ellos en seguir sus pasos, a que «no paren de dibujar, copiar, leer mucho y variado, pero sobre todo que no dejen de soñar». No obstante, aunque reconoce que no es nada fácil dedicarse profesionalmente a este oficio «tan precario que depende algunas veces más de la suerte que de la constancia», les anima a todos ellos a que, si les gusta este mundo, no cejen en su empeño. De hecho, sus inicios fueron difíciles, haciendo cómics para adultos, pero cuando vino la crisis de las revistas de esta temática, entre finales de los años 90 y principios de los dos mil, se dedicó a hacer ilustración infantil y libros de texto, relata. Así estuvo unos años, hasta que en 2011 nació su querido Superpatata dentro de la colección Mamut , especializada en cómic para niños. «Si te digo la verdad, no sé cómo se me ocurrió crear un personaje como Superpatata, pero le estaré eternamente agradecido», afirma el autor sobre su criatura, a la que aún le quedan muchas aventuras y entuertos que 'desfacer'. Aun así, cree que su superhéroe tendría complicado salvar el mundo en el plano real «porque tal como está el patio, se me antoja difícil que una patata ponga un poco de orden entre tanto villano. Lo único de lo que sería capaz, como mucho, es de bajar a un gato de un árbol».