Escupe delante de su casa y es arrestado porque su ADN lo asocia con un asesinato cometido hace 36 años

Historia rocambolesca en el que la ciencia forense tiene mucho que decir. Las miradas están fijadas estos días en Boston , donde en cuestión de días tiene que producirse una vista sobre un caso que conmocionó a buena parte de Estados Unidos. En el trasfondo de la historia está el asesinato de una joven en 1988, que tres décadas después ha visto como el arresto de un hombre como principal sospechoso de la matanza. La víctima era Karen Taylor, una madre de 25 años que el 27 de mayo de ese año fue mortalmente atacada, con quince puñaladas, mientas estaba en su casa, en Roxbury (Boston). Su hija, de tres años, fue la que acabó respondiendo al teléfono y contando a su abuela que su madre «estaba durmiendo» y no se despertaba de ninguna de las maneras. Las investigaciones entonces no consiguieron aclarar quien había sido el agresor pero años después, a principios de este año, la policía señaló y arrestó por ello a James Holloman , un hombre de 65 años que vivía en Dorchester (Boston) y que hace dos semanas acabó siendo acusado del asesinato en primer grado porque había escupido frente a su casa y los restos de ADN coincidían con pruebas en el lugar del crimen. En 1988 la policía había encontrado ADN masculino en las uñas de Taylor en un primer momento, lo que hizo pensar desde el primer momento en que había peleado por su vida. En la zona también recuperaron la colilla de un cigarrillo y una sudadera , objetos que contenían importantes rastros biológicos pero la tecnología del momento no fue lo suficientemente puntera como para poder dar con el agresor. La situación dio un giro este último mes, tres décadas después del asesinato, cuando a raíz del escupitajo se pudo vincular a Holloman con el crimen. Los restos de saliva coincidían con el cigarrillo y la prenda de ropa, por lo que no hubo duda alguna en su arresto. Él se declaró inocente pero las pruebas eran tan clarividentes que quedó arrestado sin fianza. Ahora, el juicio tiene que confirmar, o no, si Holloman es el autor material del asesinato de Karen y la audiencia está citada en cuestión de días, para el próximo día 29 de octubre. Mientras que los abogados de él cuestionan que la ciencia pueda ser tan clara con tantos años de por medio, el fiscal del distrito del condado de Suffolk, Kevin Hayden, ha destacado en un comunicado ante los medios el gran trabajo en investigación y los avances en ciencia forense.