Danny Carvajal revive el día de pesadilla que cambió su vida para bien
Danny Carvajal recuerda con una sonrisa el 11 de noviembre de 2017. Ese día, el jugador asegura que disputó el “partido más lindo de su carrera”. Carvajal, en aquel momento ficha del Albacete, fue el encargado de defender la puerta de la Selección de Costa Rica contra la potencia roja: España.
El partido e rauna oportunidad de oro o un riesgo; hoy, todavía Danny no sabe cómo definirlo. Cinco años después de aquel juego que terminó 5 a 0 a favor de España, la gente todavía recuerda el duelo, y en su familia insisten, cada año de menor forma, en que él no debió jugar.
Danny recuerda que vio el duelo como una oportunidad para despegar. Una buena actuación contra España podía impulsar de forma inimaginable su carrera deportiva, por lo que, cuando Óscar Ramírez (técnico de ese momento) le consultó si se sentía listo, él no dudó en decir que “iba con todo”.
Al final, la noche no salió como Danny lo soñaba. Al arquero tico le anotaron Jordi Alba, Álvaro Morata, David Silva (doblete) y Andrés Iniesta. No todo fue malo, porque Danny también logró paradas muy buenas: una a Isco y un par de achiques efectivos.
“Es el mejor partido que he jugado. Mucha gente, ni en PlayStation, puede enfrentar a jugadores como Andrés Iniesta, Isco, Morata, entre otros. Fue un partido sumamente difícil; España salió con todo”, dijo.
“¿Por qué yo jugué? Uno, como deportista, tiene que asumir retos. Sabía que podía salir bien o muy mal; al final, fue más lo segundo, pero no creo que toda la culpa fuera mía”, añadió.
Carvajal no esconde que aquel encuentro disputado en el estadio del Málaga fue un punto y aparte en su carrera, sobre todo porque estaba mostrando buen nivel en el Albacete, lo que lo proyectaba para llegar a la Primera División de España.
Con un mercado de fichajes a la vuelta de la esquina, Danny tenía claro que quería dar un salto, por lo que esperaba ofertas. Además, el Mundial (Rusia 2018) estaba en el horizonte.
Danny Carvajal: el futbolista que rompe con el molde y se declara un fanático del estudio
“Yo recuerdo que iba a Albacete y seguía jugando de titular. Ahora recuerdo que, después del partido, me llamaron Celso, Bryan Ruiz, Cristian Gamboa, entre otros, y me dijeron que todo era parte del fútbol”, profundizó.
En enero, cuando el mercado de piernas se abrió, Danny se vio obligado a tomar decisiones y solo contaba con dos ofertas del fútbol de Noruega, pero a último momento una oportunidad lo sorprendió.
El partido contra España generó un impacto tan fuerte en el jugador que él era consciente de que debía cambiar de aires.
“Recuerdo que ese partido lo vi varias veces. Muchos de los familiares me dicen que no debí jugarlo. La gente cree que jugar ese partido me sacó muchas cosas, pero yo nunca me arrepentí. Creo que lo asumí sin miedo, como una oportunidad. Muchas personas temerosas no arriesgan, pero yo lo hice”, declaró.
Danny decidió irse a la Tierra del Sol Naciente, una aventura que deportivamente le devolvió la confianza, ya que se pudo consolidar allí, al punto de que el último club en el que militó, el Ryukyu, le prometió un partido de despedida cuando deje de jugar.
España le pasó por encima a Costa Rica al golearla 5 a 0
“Uno se pregunta qué hubiera pasado si no hubiera jugado ese partido. Era un partido muy difícil; era imposible que ganaramos y sabíamos que sería muy rudo. Hoy, al ver la decisión que tomé, veo la puerta que se me abrió después... Es muy curioso, pero ha sido de lo mejor que me ha pasado”, relató.
Carvajal explicó que, al recibir la propuesta japonesa, tuvo una conversación con Óscar Ramírez, Luis Marín y Gabelo Conejo, y ellos le aceptaron que, si se iba a Asia, se alejaría de la Selección.
“Yo era el segundo portero, todos éramos conscientes de que me iba a alejar mucho de la Selección. Me volvía caro para venir a la Selección; traerme como segundo portero no era una opción para la Federación”, externó.
Lo que para muchos fue la peor noche de la carrera de Danny Carvajal, resultó al final ser el mejor partido desde su perspectiva, y además el que le abrió la posibilidad de convertirse en ídolo en Japón, pese a que en Costa Rica no volvió a ser tomado en cuenta en la Tricolor.