Presentan proyecto de "división" del Sáhara Occidental en Consejo de Seguridad de la ONU
Un proyecto de "división" del Sahara Occidental, un vasto territorio desértico que desde hace casi medio siglo se disputan Marruecos y el Frente Polisario, apoyado por Argelia, fue presentado en el Consejo de Seguridad de la ONU, se informó este jueves.
"Tengo que informales que, discretamente, he reanudado y reactivado con todas las partes interesadas el concepto de división del territorio", dijo el enviado del secretario general de la ONU para el Sahara Occidental, Staffan de Mistura, durante una sesión a puertas cerradas del Consejo de Seguridad, según su declaración a la que tuvo acceso la AFP.
Al término de su tercer viaje a los campos de refugiados de Tinduf, en el sur del territorio, de Mistura se dijo "impresionado por la miseria de las condiciones de vida y la ausencia de perspectivas de una vida mejor".
A raíz de la retirada de España en 1976, se desató una guerra de 15 años entre Marruecos y el grupo separatista Frente Polisario, respaldado por Argelia, por el control de esta vasta extensión desértica de 266.000 km2 rica en fosfatos y pesca.
Actualmente, Marruecos controla más del 80% de la parte occidental del territorio y el Frente Polisario menos del 20% de su flanco oriental, separado por un muro de arena y una zona tampón bajo control de los cascos azules de la ONU, que lo considera como un "territorio no autónomo".
Rabat propone un plan de autonomía bajo su égida, mientras el Frente Polisario reclama su soberanía sobre el territorio y la realización de un referéndum de autodeterminación, previsto desde 1991, en el marco de un alto el fuego.
Según de Mistura, este proyecto de "división", "permitiría, por una parte, crear un Estado independiente en la parte sur y, por otra, integrar el resto del territorio como parte de Marruecos y cuya soberanía sería reconocida internacionalmente".
No obstante, advirtió que "ni Rabat ni el Frente Polisario" han expresado la menor "señal de voluntad" de ir más lejos en las consultas.
"Lo lamento", concluyó este diplomático ítalo-sueco de 77 años, que hace más de una década ejerció de enviado de la ONU para encontrar una solución a la guerra civil e internacional en Siria.
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