Del 8,3% de Chamartín y Retiro al 45% de Puente de Vallecas: la brecha de la pobreza infantil en Madrid
Las ONG denuncian que las diferencias entre distritos ricos y pobres, con cifras de riesgo de pobreza superiores al 40% en algunas zonas, acentúan la desigualdad social
¿Por qué España no sale del agujero de la pobreza infantil? Las políticas son la mitad de eficaces que en Europa
En la Unión Europa uno de cada cuatro niños crece en riesgo de pobreza infantil. Aunque esta cifra había disminuido progresivamente hasta 2019, desde entonces afecta a un millón de niños más, alcanzando el 25,2%. España es el segundo país de la Unión Europea con mayor tasa de pobreza infantil, con una cifra aproximada del 33%, lo que supone un aumento de 1,6 puntos desde 2019, según datos de Save the Children.
La tasa de pobreza infantil en Madrid es del 30,2%, un valor ligeramente inferior a la media nacional. Sin embargo, la desigualdad entre los distritos de la ciudad es de las mayores de España. Por ejemplo, mientras en Puente de Vallecas la tasa alcanza un alarmante 45%, en el distrito vecino de Retiro es del 9,1%. Además, la brecha entre la tasa de riesgo de pobreza general y la infantil no hace más que ensancharse, llegando a un 17% durante el último año.
Asimismo, el 9% de los niños en riesgo de pobreza de todo el Estado, aproximadamente 230.000, viven en el área urbana de Madrid, lo que convierte a la capital en un ejemplo galopante de la creciente desigualdad social. El último informe del Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil resalta que la ciudad concentra tanto pobreza como riqueza extrema. En distritos como Tetuán la tasa de riesgo de pobreza infantil se sitúa en el 29,9%, mientras que en Chamartín es del 8,3%.
Las ONG de defensa de la infancia, como Save the Children o UNICEF, llevan años en pie de guerra denunciando la situación y reclamando soluciones a las instituciones. Según Save the Children, cerca de un millón niños y adolescentes carecen de bienes y servicios básicos, evidenciando el impacto de la inflación y la insuficiente subida de ingresos de las familias con menores. En 2023 la pobreza infantil en España subió al 28,9%, aumentando la brecha con el resto de la población cuya tasa se mantiene en 20,2%. Esto significa que la pobreza infantil es 8,7 puntos mayor que la de la población general, la mayor diferencia en la historia desde que se tienen datos.
La organización advierte de que el aumento de la pobreza infantil en Madrid no se debe solo al crecimiento de las rentas, que eleva los umbrales de pobreza, sino que los ingresos de los hogares con niños no han subido al mismo ritmo que otros grupos. Además, la carencia material severa, que afecta a los bienes esenciales para la infancia, también ha aumentado. Save the Children insta a políticas urgentes para evitar que la crianza de hijos sea un factor de empobrecimiento y romper el ciclo de pobreza que se perpetúa entre generaciones.
Una situación especialmente grave en algunos distritos
Las diferencias entre distritos son abismales, con tasas que varían desde el 8% hasta más del 45%. Diego Santamaría, experto en pobreza infantil de Save the Children, señala que en la ciudad de Madrid es grave la gran disparidad en los niveles de pobreza y que se puede explicar, entre otros, por factores como la proporción de población joven y/o migrante, colectivos que enfrentan mayor precariedad.
En ese sentido, en el último informe de UNICEF, España: pobreza infantil en medio de la abundancia, también se apunta a la condición de migrante como factor clave respecto al riesgo de entrar en situación de pobreza de los niños y niñas del país. En España la tasa de pobreza infantil se dispara al 70% cuando los dos progenitores son extranjeros, casi el triple que la tasa cuando ambos son españoles (24%). Por tanto, casi 3 de cada 4 niños con progenitores extranjeros viven en situación de pobreza.
Santamaría también explica que un 26% de los hogares con niños tiene muchas dificultades para llegar a fin de mes, frente al 17% de los hogares sin menores. Además, el 12,8% de los niños sufre carencia material severa, cifra superior a la media nacional y que ha aumentado 4 puntos respecto al año anterior. Según Santamaría, la inflación ha agudizado estas dificultades, hecho que han observado especialmente en zonas como Vallecas, Leganés o Fuenlabrada, donde el coste de la vida sigue subiendo mientras las condiciones materiales continúan siendo precarias.
Ante este panorama, su organización apuesta por una prestación por crianza para compensar el elevado coste de tener hijos, además de hacer más accesibles servicios como el comedor gratuito y ayudas para libros de texto. También lamenta que, tras la llegada del Ingreso Mínimo Vital, el gasto en la renta mínima en la CAM ha disminuido drásticamente, afectando a las familias más vulnerables.
Otro factor determinante en el caso de la ciudad de Madrid es la persistencia del problema. La tasa de pobreza infantil persistente (que incluye a los niños y niñas que se encuentran durante dos o más años en situación de pobreza) es especialmente elevada: por encima del 20%, según los últimos datos de UNICEF (que también sitúan a España como el cuarto país con una mayor tasa en la Unión Europea en este ámbito).
La cronificación de la pobreza infantil es un proceso especialmente peligroso porque es un factor diferencial frente a aquellos aquellos niños que no sufren pobreza o lo han hecho de manera puntual en cuanto a problemas de aprendizaje, de salud o problemas emocionales y de comportamiento.
La gestión del Ayuntamiento de Madrid
La cuestión de la pobreza infantil en la ciudad de Madrid ha llevado a la oposición a cuestionar las políticas del gobierno municipal y regional. Emilia Sánchez-Pantoja, diputada de Más Madrid y vicepresidenta de la Comisión de Familia y Asuntos Sociales en la Asamblea, critica que las políticas fiscales de la Comunidad de Madrid incrementan las desigualdades en lugar de corregirlas. “Madrid baja impuestos a todos, pero lo hace de forma desigual”, explica.
En este sentido, la diputada denuncia que mientras que los más ricos ahorran grandes sumas, las familias humildes apenas notan la diferencia, viéndose obligadas a pagar de su bolsillo servicios esenciales como el comedor escolar o el dentista. Esto agrava la desigualdad, perjudicando especialmente a quienes menos recursos tienen y en áreas esenciales como la sanidad. “Somos la comunidad con más seguros médicos privados porque somos la comunidad con menos servicios públicos”, apunta Sánchez-Pantoja.
Otra cuestión que está al orden del día es el precio de la vivienda, que Sánchez-Pantoja califica como “una máquina de fabricar pobreza”. Las familias con hijos, ya de por sí con más gastos, sufren un doble impacto económico al tener que destinar gran parte de sus ingresos al alquiler, explican desde Más Madrid. Esta situación es más dura en los barrios con tasas de pobreza infantil elevadas.
Las asociaciones como UNICEF hablan de la importancia de garantizar la protección social de la infancia a través de herramientas como la educación y la vivienda. En esta línea, Más Madrid apuesta por medidas como la educación pública y gratuita de 0 a 3 años, reducir la segregación escolar por nivel socioeconómico y origen étnico o nacionalidad o financiar los libros de texto. Según la diputada, estas políticas redundan en mejores resultados académicos y reducen el abandono escolar y la pobreza infantil.
Por su lado, fuentes del área de Políticas Sociales, Familia e Igualdad del Ayuntamiento de Madrid defienden que la administración ha aumentado las ayudas a familias vulnerables y los recursos destinados a combatir la pobreza infantil. Desde el Ayuntamiento defienden que han incrementado los presupuestos en programas de alimentación escolar y becas para actividades extraescolares, con el objetivo de paliar las desigualdades entre los distritos. Además, destacan la puesta en marcha de iniciativas de apoyo psicológico y asistencia social.
Desde Más Madrid, en cambio, critican la falta de un plan efectivo por parte del Gobierno municipal para enfrentar la pobreza infantil. Denuncian las ayudas simbólicas que dejan fuera a muchas familias y mencionan la ausencia de una estrategia para implementar la Garantía Infantil Europea en Madrid. Para Más Madrid, es urgente establecer “un plan con metas claras que garantice servicios esenciales como la educación y la alimentación, apoyando así a todas las familias”.
Fuentes del Ayuntamiento reconocen que los desafíos siguen siendo significativos, especialmente en los distritos más desfavorecidos, donde las condiciones socioeconómicas presentan retos adicionales. Aún así, aseguran que se está trabajando en colaboración con ONGs y otras instituciones para diseñar políticas a largo plazo que mitiguen la cronificación de la pobreza infantil y para mejorar el acceso de estas familias a servicios esenciales como la vivienda y la educación. Aprovechan también para hacer un llamamiento al Gobierno de España para que impulse más medidas de protección de la infancia en colaboración con las otras instituciones.