Investigan la posIble venta de armas a los hutíes por parte del traficante ruso Viktor Bout
El ruso Viktor Bout, uno de los traficantes de armas más famosos del mundo, vuelve a ser el centro de atención tras su liberación como parte de un acuerdo de intercambio de prisioneros con Estados Unidos. Parece que Bout, que pasó años en prisionesde EE.UU., acusado de contrabando de armas y conspiración para matar estadounidenses, ha regresado a su controvertida actividad empresarial. Según un informe de The Wall Street Journal, Bout estaría negociando un acuerdo para suministrar armas a los hutíes respaldados por Irán en Yemen, lo que genera preocupación generalizada entre la comunidad internacional.
Una delegación hutí viajó a Moscú en agosto de 2024 para negociar un acuerdo de armas con Bout por valor de 10 millones de dólares. Según fuentes de seguridad europeas, el posible acuerdo incluye dos envíos de rifles de asalto AK-74, una versión mejorada del rifle AK-47, que es un arma popular en muchos conflictos armados en todo el mundo. Estas armas, aunque clasificadas como ligeras, pueden contribuir a mejorar el poder militar de los hutíes en el conflicto yemení.
Aunque el acuerdo inicial se refería a armas ligeras, las negociaciones se ampliaron para incluir discusiones sobre armas más avanzadas. Los hutíes han mostrado interés en adquirir misiles antitanques Kornet, así como armas antiaéreas.
La administración Biden sigue de cerca estos movimientos, ya que Washington teme que el acuerdo de armas rusas a los hutíes sea parte de una campaña de represalia debido al apoyo de Estados Unidos a Ucrania en su conflicto con Moscú. Si bien aún no ha surgido evidencia de la participación de Bout en la venta de armas avanzadas, como misiles antibuque, Washington y sus aliados en el Golfo están monitoreando la situación con cautela. Cualquier escalada en el suministro de armas rusas avanzadas a los hutíes puede impulsar una mayor intervención internacional y provocar un aumento de la tensión en la región.
En cuanto a las acusaciones contenidas en el informe, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, negó la validez de lo informado en el Wall Street Journal y calificó la historia de “falsa”. Esta negación se produjo como parte de los intentos de Rusia de reducir las tensiones relacionadas con su posible participación en el suministro de armas a los hutíes, mientras que éstoss no hicieron comentarios.
Desde su salida de prisión en diciembre de 2022, Bout se ha unido a la política en Rusia y ganó un escaño en un consejo local en la región de Ulyanovsk en 2023. Este giro hacia la política ha sugerido a algunos que ha dejado atrás el mundo del tráfico de armas, pero su posible implicación en el negocio con los hutíes indica lo contrario.
Bout, que ha sido descrito durante muchos años como un “mercader de la muerte” debido a su papel en el suministro de armas a grupos en todo el mundo, todavía puede desempeñar un papel fundamental en los conflictos internacionales. Su currículum incluyó períodos de intensa actividad en África, América Latina y Medio Oriente, donde intercambió armas fabricadas en la ex Unión Soviética y las vendió a diversas partes en conflictos regionales.