Muere la leyenda de la NBA Dikembe Mutombo a los 58 años
Dikembe Mutombo , leyenda de la NBA , ha muerto este lunes a los 58 años de edad. El pívot, nacido en la República Democrática del Congo y con una larga trayectoria en el baloncesto estadounidense, no pudo vencer al cáncer cerebral con el que convivía desde 2022. Militó en los Denver Nuggets, en los Atlanta Hawks, en los New Jersey Nets, en los New York Knicks y en los Houston Rockets, club en el que se retiró en 2009. En 2015 fue nombrado miembro del Salón de la Fama, el máximo honor al que puede aspirar un jugador de la NBA. Además de por sus acciones defensivas, Mutombo siempre fue muy reconocido y querido por sus labores humanitarias, muchas de ellas enfocadas a la población africana. «Dikembe Mutombo era más largo que la vida misma. En la pista, fue uno de los mejores taponadores y defensores de la historia de la NBA. Fuera de ella, dedicó todo su corazón y su alma para ayudar a otros (...). Él amaba cómo el baloncesto podía tener un impacto positivo en las comunidades, sobre todo en República Democrática del Congo y en su África natal », ha asegurado el comisionado de la NBA Adam Silver en un comunicado. «El espíritu indomable de Dikembe continuará en aquellos que ayudó e inspiró con su extraordinaria vida. Yo soy una de las muchas personas cuyas vidas cambiaron al entrar en contacto con él y lo echaré de menos todos los días». El africano deja un currículum impresionante a sus espaldas. Ganó cuatro veces el premio a mejor defensor de la NBA, fue ocho veces All-Star y acabó su carrera como segundo máximo taponador de la historia de la liga (3.289), solo superado por el mítico Hakeem Olajuwon (3.830). También se convirtió en icono por cómo chinchaba a sus rivales cuando les impedía una canasta con sus gigantescas manos y con sus 218 centímetros. «Not in my house», «No en mi casa» en castellano, era la frase que les dedicaba mientras negaba con el dedo. Tal era su capacidad para desquiciar a los equipos rivales que incluso el mejor de siempre, Michael Jordan , quiso vengarse de él con una jugada histórica. En un duelo entre los Nuggets y los Chicago Bulls en 1991, el 23 encestó un tiro libre con los ojos cerrados y se lo dedicó al africano. «Dikembe, esto es para ti, bebé».