Terrorismo: cayó una banda argentina sospechada de financiar a Hezbollah
Una banda integrada por cuatro personas y que está sospechada de financiar al grupo terrorista Hezbollah fue desbaratada durante las últimas horas en las provincias de Córdoba y Santa Fe.
Los arrestos se concretaron un mes después de que la Unidad de Información Financiera (UIF) le congelara los fondos a un colombiano nacionalizado argentino y a un sirio, ambos presuntamente vinculados con la organización extremista.
La organización delictiva sospechada de financiar al terrorismo internacional fue desmantelada por Efectivos del Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista de la Superintendencia de Investigaciones Federales, según informó la Policía Federal Argentina (PFA) en un comunicado.
Los cargos son por intervención de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), a partir del informe elaborado por UIF, donde se advertía sobre operaciones en criptomonedas.
Se habrían identificado 34 operaciones en activos virtuales en USDT realizadas por el investigado entre marzo y junio de este año. Dichas transacciones estarían indirectamente relacionadas, en un cuarto grado, con otra billetera que fue señalada como sospechosa de financiamiento del terrorismo por la herramienta de monitoreo estadounidense "Chainalysis".
En cuanto al volumen de fondos involucrados, se calcula que, durante dos años, la cifra ascendió a 1.800 millones de pesos, tanto en movimientos de crédito como de débito.
Con la información obtenida por las fuerzas federales, y tras diversas tareas de campo avaladas por la Fiscalía Federal de San Francisco, a cargo de María Marta Schanni, el Juzgado Federal de San Francisco, subrogado por Sergio Aníbal Pinto, ordenó la realización de siete allanamientos en la localidad cordobesa de La Porteña y uno en Vila, en la provincia de Santa Fe.
Durante los procedimientos, se detuvo a dos hombres y dos mujeres, y se incautaron tres escopetas, una pistola, un rifle de aire comprimido, municiones de diversos calibres, dinero en billeteras virtuales, cuadernos con anotaciones, una CPU, notebooks y siete teléfonos móviles. Los detenidos, junto con los elementos secuestrados, quedaron a disposición del magistrado.
Por su parte, la PFA señaló que, debido a la magnitud de los operativos, colaboraron agentes de la Agencia Regional Federal Centro Córdoba, el Departamento Técnico de Cibercrimen y el Departamento de Armas y Explosivos, todos pertenecientes a la Policía Federal Argentina.