Familia de exrector denuncia a la UAP por acciones de S/95 mllns. que no les pertenece

El fiscal Lucio Sal y Rosas Guerrero inició investigación a pedido de la viuda y las hijas del fallecido exrector de la Universidad Alas Peruanas (UAP) Fidel Ramírez Prado contra las actuales autoridades de esta institución por el retiro de acciones de la casa de estudios cuyo valor asciende a S/95,3 millones.

Nancy Gallegos, viuda de Ramírez, y sus hijas Nancy y Maribel Ramírez Gallegos afirman que los administradores de la UAP les han “arrebatado” 86.055.633 acciones clase A y 8.999.998 acciones clase B, que estaban a nombre de Fidel Ramírez Prado, además de otras 300.000 acciones clase B a título de Nancy Ramírez Gallegos.

Sin embargo, la actual administración de la UAP ha informado que dicho retiro de acciones se sustenta en que estas no podían ser adjudicadas mediante herencia, porque tenían un carácter personalísimo. Y con la muerte de Fidel Ramírez, se perdió la causa concreta para la cual fueron transferidos, por lo que debían retornar a la Cooperativa Alas Peruanas, propietaria de la universidad del mismo nombre.

La decisión tiene como base un diagnóstico legal elaborado por el estudio Mejorada Abogados, especializado en materia patrimonial y derechos sobre bienes, que concluye: “Los contratos de transferencia de acciones perdieron su ‘causa concreta’ y las obligaciones personalísimas a cargo del señor Ramírez Prado se tornaron de imposible cumplimiento. Por tanto, conforme a lo señalado, con el deceso del señor Ramírez Prado, dichos contratos terminaron de pleno derecho y las acciones retornan automáticamente al patrimonio de la Cooperativa”, por lo que no pueden ser reclamadas como herencia.

“El señor Ramírez Prado fue escogido por la Cooperativa para aparentar ser accionista de la UAP con la finalidad de lograr la pluralidad de socios exigida por la norma. (…) Las acciones de la UAP que les fueron asignadas en realidad son de la Cooperativa”, señala el estudio jurídico del abogado Martín Mejorada.

“También son de la Cooperativa las acciones que se inscribieron a nombre de Fidel Ramírez Prado producto de diversos aumentos de capital, que le fueron asignadas sólo porque él figuraba como accionista de la UAP. En ese sentido, las acciones que estuvieron a nombre de Ramírez Prado han pertenecido siempre a la Cooperativa”, indica el diagnóstico.

“Luego del fallecimiento de Ramírez Prado, sus acciones simuladas se inscribieron erróneamente a nombre de su sucesión. Los herederos de Ramírez Prado no podían adquirir las acciones”, concluye el informe. Precisamente, a la muerte de Fidel Ramírez, su viuda y sus hijas inscribieron las acciones de éste en la sucesión intestada, como si hubieran sido de su propiedad.

Ante la imposibilidad de acceder a los S/95,3 millones en acciones, porque siempre le pertenecieron a la UAP, la familia Ramírez denunció a los actuales directivos de la universidad ante la Cuarta Fiscalía Supraprovincial Corporativa Especializada contra la Criminalidad Organizada, a cargo del fiscal Lucio Sal y Rosas.

Recientemente, el juez Richard Concepción Carhuancho señaló al fiscal Sal y Rosas de haber devuelto cinco barras de oro al empresario Javier Miu Lei.

Pese a que Nancy Gallegos viuda de Ramírez y sus hijas Nancy y Maribel Ramírez afrontan denuncias por organización criminal y lavado de activos, entre otras razones por haber desfalcado los fondos de la UAP durante y después de la gestión de Fidel Ramírez Prado, el fiscal Lucio Sal y Rosas inició investigación preliminar contra las actuales autoridades de la universidad.

Incluso dichas acciones fueron materia de incautación en la investigación seguida en contra de Nancy Gallegos viuda de Ramírez y sus hijas Nancy y Maribel Ramírez, justamente porque el Ministerio Público considera que eran parte de las adquisiciones ilegales de la familia Ramírez.

De acuerdo con la sustentación de la denuncia del apoderado legal de la familia Ramírez, Roger Arellano Alva, la nueva directiva de la UAP montó una “organización criminal” para apropiarse de las mencionadas acciones aprovechando la muerte de Fidel Ramírez Prado, ocurrida el 9 de abril de 2019.

“Las acciones que pertenecieron a Fidel Ramírez Prado al fallecer pasaron por sucesión intestada a sus herederos, Nancy Gallegos viuda de Ramírez, y Nancy y Maribel Ramírez. La universidad asumió un acuerdo unilateral y anuló las acciones de Fidel Ramírez y las inscribió en la Cooperativa de Servicios Múltiples Alas Peruanas y la empresa Inversiones Educativas IESCOOP”, explicó el representante de la familia Ramírez, Roger Arellano.

Empero, como se ha indicado, las acciones a nombre de Ramírez siempre fueron de propiedad de la cooperativa Alas Peruanas.