El truco para convertir tu hamburguesa casera en una auténtica 'smash burger'
No hay nada como el sabor de una hamburguesa cuando el hambre llama. Pero es aún mejor cuando se hace en casa, ya que conocemos los ingredientes que usamos y queda a nuestro gusto sin tener que gastar mucho dinero. Hoy en día, todos buscan innovar en la receta y, ¿cómo no? Hemos evolucionado con diferentes enfoques e ingredientes. Una de las nuevas tendencias, cuando hablamos de hamburguesas, es la conocida 'Smash burger' o, en castellano, hamburguesa aplastada.
A diferencia de las hamburguesas tradicionales, las smash burgers se caracterizan por aplastar la carne directamente sobre una plancha caliente. Este método logra una superficie crujiente y caramelizada conocida como la reacción de Maillard, que aporta un sabor intenso y una textura jugosa. Aunque se originaron en la década de 1920 en los Estados Unidos, en un pequeño restaurante llamado Dyer's, ubicado en Memphis, Tennessee, la técnica de 'smashing' ha vuelto a captar la atención y cada vez es más famosa.
¿Cómo hacer una 'Smash burguer' en casa?
Lo primero es formar bolas sueltas con la carne molida, sin compactarlas demasiado. A partir de ahí, se calienta una sartén o plancha a fuego muy alto. Este paso es clave, ya que la alta temperatura es lo que permite que la carne se caramelice y se cree la costra crujiente. Una vez que la plancha esté bien caliente, se coloca la bola de carne en la sartén y se aplasta inmediatamente con una espátula, hasta que quede bien delgada.
Después de cocinarla por unos minutos de cada lado, y si prefieres una cheeseburger, puedes añadir una loncha de queso cheddar mientras la carne aún está caliente, para que se derrita sobre la hamburguesa. Finalmente, tuesta los bollos con un poco de mantequilla y añade tus toppings favoritos, como cebolla, pepinillos, lechuga o salsa, antes de montar la hamburguesa.
El truco para convertir tu hamburguesa casera en una 'Smash burguer'
Una de las características estrella de la smash burguer es su suavidad, siempre parece que esta un poco mojada debido a la jugosidad que la carne desprende. El pan se está blando, los ingredientes compactos en una buena mezcla de sabor y la sensación que deja en la boca es única, y lo cierto es que podemos darle a cualquier hamburguesa ese toque con un simple paso.
Al envolver la hamburguesa en aluminio, se evita que los jugos se evaporen, lo que mantiene la carne más jugos. Eso sin mencionar que el vapor que se genera dentro del paquete ayuda a ablandar el pan. Además, el aluminio actúa como una barrera que mantiene la hamburguesa caliente por más tiempo. Esto es especialmente útil si estás sirviendo varias hamburguesas y quieres que todas lleguen calientes a la mesa al mismo tiempo.