Luis Flores, veterinario en la zona cero de la viruela del mono: "Estamos en la mierda y la mierda trae más mierda al sitio"
Luis Flores nación en Jerez de la Frontera y hace ocho años que desarrolla su vida profesional en República Democrática del Congo. Licenciado en medicina veterinaria por la Universidad de Córdoba, se trata de uno de los profesionales que mejor conocen el desarrollo de la viruela del mono y sus posibles consecuencias a nivel global. Desde la ONG local fundada con otros colegas congoleños, One Health Conservation Initiative, y gracias a su amplia experiencia como jefe del Centro de Rehabilitación de Primates del Lwiro (CRPL), habla con LA RAZÓN sobre la nueva variante del virus, cuyos efectos a largo plazo aún se ignoran.
Para los que somos profanos en esta materia: ¿qué es el virus del mono y qué de nuevo encontramos en la nueva variante que ha hecho saltar las alarmas?
El virus del mono es un virus zoonótico que procede de los animales de la selva. Cada vez que el virus salta, que ya ha ocurrido varias veces, sucede porque nosotros interaccionamos con la selva de diferente manera. Tenemos que entenderlo como un virus que procede de los animales y que llega a los humanos a través de la interacción con las selvas tropicales africanas. Entonces, ¿qué pasa en Kamituga? Pasa que nosotros explotamos un montón de minerales, lo que lleva por una parte a la interacción con la selva, pero también hay un gran consumo de carne de la selva. No sabemos si este clado I(b) es un virus original que viene de los animales directamente o si se trata de una transformación. Lo que está claro, para que la gente lo entienda, es que la epidemia y la alerta mundial del Mpox está relacionada con este nuevo virus, con el clado I(b), que es un virus que ha cambiado de traje, que se ha cambiado de gafas, por así decirlo, y que interacciona de manera diferente con el sistema inmune del ser humano. Ya no se transmite únicamente por relaciones sexuales, como ocurría con variantes previas. También debe entenderse que esta variante aparece en el borde de la selva ecuatorial africana, y esto ha hecho que el virus se haya “humanizado” más rápidamente. Pero hay una cosa que está clara: al cambiar el virus de traje y de gafas, al cambiar su indumentaria, sobre todo en la parte que va a interaccionar con nuestro sistema inmune, va a cambiar su forma de transmisión. Ha encontrado otra manera de transmitirse que aún no sabemos cuál es. La transmisión de humano a humano se ha hecho mucho más eficiente. Ha perdido en mortalidad pero, ojo, el COVID-19 tenía un 1% de mortalidad, y este virus, con los datos que manejamos quienes estamos aquí, tiene una mortalidad de entre el uno y el dos por ciento. Es cierto que cuando hablamos de África queremos decir que las cosas aquí son diferentes, que tienen menos higiene, que tienen menos cuidado, y eso mismo pensaba yo cuando llegué a Kamituga, pero resulta que el virus se ha vuelto más cómodo cuando ha salido de la sociedad de Kamituga. Y cuando un virus gana en transmisión, lo hace porque aumenta la carga viral de las heridas o incluso la carga viral de la faringe. Ahora mismo no sabemos si tiene más carga viral en la faringe y si se transmite a través de la saliva. A través del aire no creemos que sea pero, en definitiva, tenemos un nuevo virus. Y lo tenemos que parar aquí. En el lugar de origen.
Por lo que se dice, parece que el contagio original procede de las prácticas sexuales de humanos con simios, aunque imagino que se debe antes al consumo de carne contaminada.
Es importante saber que se le conoce como viruela del mono porque se descubrió por primera vez en unos monos que llegaron a Dinamarca, pero no tiene que ver con mantener relaciones sexuales con un mono, ni tiene nada que ver con estar cerca de los primates. El reservorio del virus también se ha hallado con especies de roedores y de ardillas voladoras, pero hay muchas cosas que aún no se saben. La transmisión original del virus se da cuando alguien caza carne de la selva, siendo el momento más peligroso cuando se realiza el despiece del animal. Es verdad que la carne se prepara, se ahúma o se sala, y si esa carne está infectada con el virus y no se trata adecuadamente, también se podría infectar la persona que coma la carne de la selva bajo determinadas circunstancias. Pero debe quedar claro que es sobre todo el consumo de carne de la selva lo que lleva a estas enfermedades. Cuando lees artículos que hablan de rasguños y el contacto con la sangre, hay que saber que poca gente va a la selva e interactúa con los animales para otra cosa que no sea comérselos. Puede haber también interacciones para el tráfico de animales, aunque generalmente se mata al chimpancé adulto, y se come, y la cría de chimpancé es la que termina en el tráfico de animales. Pero esto tiene que ver con el consumo de carne de la selva en sitios como Kamituga, donde la gente está ocupada en trabajar en las minas y donde la producción animal no existe. Lo que se come es la carne de la selva.
¿Por qué es República Democrática Congo el lugar de origen de este virus, y no otros países donde igualmente se consume carne de la selva?
La mayoría de República Democrática del Congo forma parte de la selva ecuatorial africana. La selva ecuatorial africana es la cuenca del río Congo y se considera uno de los sitios donde existe una mayor biodiversidad en todo el planeta. Esto lo convierte en uno de los principales nichos ecológicos para parásitos, bacterias y virus. Estamos en un lugar con un alto nivel de biodiversidad, en un continente que es el más antiguo porque fue el primero que se configuró morfológicamente, y estamos en un sitio donde más abundan los patógenos. Hay que entender que África es un lugar muy complicado y que la evolución humana habría sido imposible si cien o doscientos tipos no se hubieran desplazado a climas más templados en Europa y donde hay menos enfermedades. La gente se piensa que la vida en África es fácil, pero si vienes aquí te das cuenta de lo difícil que es sobrevivir. También hay que tener en cuenta que República Democrática del Congo es uno de los lugares donde se consume más carne de la selva. Hay razones de subsistencia, razones culturales, pero también que producir vacas o pollos no es tan sencillo aquí como producirlos en Europa. Esto es una historia de supervivencia donde también hay procesos ecológicos entre especies y sus parásitos, los virus y las bacterias, y son procesos estables que están allí porque duran miles de años. El virus sólo quiere que su ADN siga existiendo y aguantar una generación tras otra, y los virus forman un papel fundamental en la evolución de las especies porque son capaces de introducir trozos de ADN y provocar cambios genéticos. Lo que pasa es que, en un mundo desarrollado y donde se explota una gran cantidad de recursos, interactuamos en mayor medida con la selva. Recuerda que en 2018 hubo otra epidemia importante de una enfermedad emergente, el ébola, que salió de Kivu Norte, otra vez en el borde de la selva ecuatorial africana.
¿Podemos decir que la población local tiene la concienciación necesaria para lidiar con el virus?
No la tienen. No la tienen y la piden. Dicen que necesitan información y que quieren estar sensibilizados, pero tienen muy poca. Se está hablando de hacerlo y de cómo hacerlo para que la gente sepa identificar si sus hijos han enfermado y llevarlos al hospital. Porque nosotros tenemos los datos de quienes acuden al hospital pero nos faltan todos los datos de quienes no vienen. El grado de conocimientos es muy bajo y es muy importante trabajar más en ello. Pero, hasta ahora… yo no sé donde está todo el dinero que Europa da a grandes organizaciones internacionales. Se va en logística, en salarios, en pagar coches… y si se va todo en logística, aquí llega una cantidad ridícula.
¿A quiénes afecta más la nueva variante?
Ayer por la noche estaba haciendo el Excel de los primeros 200 casos que han llegado al hospital de Lwiro y el 30% eran niños de menos de doce meses. Yo tengo las estadísticas de otro hospital donde pasaron 600 personas y los datos coinciden, también hay un 30% de niños menores de doce meses. Y menores de 15 años contabilizamos un 70%. Estos datos aún no están publicados pero pronto se hará. Hay que tener en cuenta, además de la transmisibilidad, cómo se distribuyen las lesiones por el cuerpo. Las lesiones de la nueva variante se dan por todo el cuerpo, mientras que las lesiones del clado II(c) que había en Europa se limitaban a las zonas genitales y a la boca. A los niños que tratamos se lo estamos viendo en todo el cuerpo, en la barriga, en los brazos, las piernas. En los adultos, cuyo sistema inmunitario parece estar más protegido, no estamos viendo estas lesiones tan extendidas en el cuerpo.
¿Afecta de la misma manera a las personas blancas y a las personas negras?
Nosotros no hemos tenido clado I(a) en Europa. No hay datos de cómo pueden afectar a las personas blancas. Pero aquí sacamos algo importante y que la gente debe saber: que en Europa y Estados Unidos hay viruela del mono, que la enfermedad está circulando desde hace años, pero que no es la misma variante de la que estamos hablando hoy y que la preocupación es la expansión de esta nueva variante. Yo no me puedo imaginar lo que le pasaría a una madre europea que tenga con un hijo infectado y con la piel llena de pus como los hay aquí, ni cómo manejará un médico europeo esa imagen y el dolor que sienten los niños por todo el cuerpo. De lo peor que ocurriría en Europa, si llega el virus allí, es el impacto que tendría sobre la imagen de las personas cuando vean las vesículas que se forman y las caras hinchadas como se hinchan aquí. Por eso, lo que me has preguntado es interesante, porque el COVID-19 tampoco afectó de la misma manera a los europeos que a los africanos. Yo vivía aquí durante el coronavirus y súper tranquilo, aquí no hubo ninguna histeria colectiva como en Europa. Y el virus ha cambiado y los sistemas inmunes africanos están muchos más desarrollados que el nuestro. El sistema inmune europeo está muy poco entrenado y no sabemos lo que ocurriría de llegar allí la nueva variante.
Háblame de las dificultades a las que os enfrentáis en el día a día.
En el hospital de Lwiro no hay luz. Ahora están instalando un depósito de agua porque ni siquiera hay duchas. Las camas no tienen sábanas, mantas o mosquiteras. Ni siquiera tenemos jabón para lavar a los niños y desinfectarles. Yo, con mi organización y con la ayuda de otras personas, hacemos lo que podemos según las necesidades que nos van transmitiendo los médicos. Estamos hablando de una situación inhumana. Si una persona de Europa viera esto, se llevaría las manos a la cabeza. Es indigno que esto siga ocurriendo en el siglo XXI y que organizaciones como UNICEF y la OMS digan que están haciendo algo, cuando la gente no tiene siquiera las condiciones básicas para ser tratados, y no digo ya tratados de manera digna. Yo pongo parches, pero lo suyo sería que la gente tenga sábanas y agua corriente en el hospital. He escrito dos veces a la Embajada y entiendo que me dicen que ya dan dinero a UNICEF, pero yo les pregunto si realmente quieren que se solucionen los problemas sobre el terreno. En la provincia de Kivu Sur ya hay al menos veinte zonas de salud afectadas y no hay capacidad. Habrá que tirar de otros hilos, aparte de las grandes organizaciones internacionales, porque el virus ya ha llegado a Goma (Kivu Norte) y se espera que alcance pronto la zona donde combate el M23; el virus ya está cómodamente instalado en Burundi y en Kenia. Cuando miro el mapa con la distribución del virus, tengo claro que el próximo sitio donde llegará es Etiopía. Ethiopian Airlines tiene importantes conexiones con los aeropuertos de Goma y de Kigali (Ruanda) y el virus se va instalando poquito a poquito.
¿Hay algo que consideres que la población deba saber para comprender la situación de la manera adecuada?
Hay una cosa que la gente debe tener en cuenta, hablando del este de República Democrática del Congo y del conflicto que lleva aquí instaurado desde hace treinta años en relación con las riquezas minerales que se extraen. Todo lo que nos pasa ahora aquí y todo lo que pueda pasar con este virus tiene que ver con nuestro confort. Nuestro confort con los dispositivos móviles que manejamos todos los días y a través de los cuales vivimos y nos comunicamos. Es muy importante que la gente de los países desarrollados sepa que el confort tiene un precio que tiene que ver con la explotación de la selva ecuatorial africana, y que este es el conflicto que debemos resolver primero. De esta manera, cuando ocurran cosas como este virus, podrán arreglarse estando todavía aquí. Por ejemplo, el director de la OMS, que debería venir aquí, no aparece porque es un sitio demasiado peligroso. Entonces no viene precisamente adonde debería venir. Es una pescadilla que se muerde la cola: estamos en la mierda y la mierda trae más mierda al sitio. Es muy importante que se sepa que lo que está ocurriendo tiene que ver con la forma en la que vivimos y la explotación de la selva ecuatorial africana, y que las enfermedades emergentes van a ser una de las principales noticias lo que queda de siglo.