Milei quebró a la UCR y gana tiempo a favor del veto a las jubilaciones: cómo fueron las negociaciones
La reunión que tuvo Javier Milei esta mañana en Casa Rosada con un grupo de diputados de la UCR terminó de dinamitar la posibilidad de la oposición de rechazar el veto presidencial a la movilidad jubilatoria. En rol político, el jefe de Estado, junto a su hermana Karina Milei, logró quebrar la unidad radical para defender su decisión política.
De esta manera la oposición no podrá reunir los dos tercios necesarios ni para votar contra el veto sin dictamen de comisión ni para insistir con la ley por lo que sólo podrían emplazar a las comisiones a discutir rápidamente la cuestión. En esta jugada Milei contó con los buenos oficios de su único ministro radical, el excandidato a vicepresidente Luis Petri, y según fuentes parlamentarias también de algún gobernador.
La reunión, de la que también participaron el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, fue convocada en vísperas de una sesión que preocupa al Gobierno nacional y que estratégicamente fue pedida por dialoguistas como Miguel Ángel Pichetto pero no por Unión por la Patria.
La presencia de los radicales en Gobierno enojó a parte del bloque que tiene previsto un encuentro para este martes a las 18. La idea de la bancada que conduce Rodrigo de Loredo era acordar una postura común. Unos pedían insistir con la ley de movilidad jubilatoria tal como fue sancionada en el Congreso -una ley presentada por el radicalismo- mientras otros empezaron a dudar y solicitaron insistir sólo con algunos artículos como la recomposición de los haberes que perdieron un 8% contra la inflación de enero.
Irónicamente a los diputados que se desmarcaron ya los llaman "radicales mileístas línea fundadora". En la lista están Luis Picat (Córdoba); Federico Tournier (Corrientes); Pablo Cervi (Neuquén); Mariano Campero (Tucumán) y Martín Arjol (Misiones).
Los más molestos empezaron a hacer circular el discurso con el que el tucumano fundamentó su voto a favor de la recomposición de los jubilados en junio de este año. "La motosierra tiene que ir a la casta, a los que se benefician del Estado argentino, a los que cobran sobresueldos y no a nuestros jubilados", expresó Campero quien además subrayó que era "una obligación moral que tenemos en este recinto" aprobar la ley.
Camino al aeropuerto para viajar al encuentro con el Presidente Campero justificó su cambio de postura y acusó al kirchnerismo de apuntar contra el plan económico. En redes sociales subió su argumentación en un video arriba de su auto.
Facundo Manes, claramente en la vereda del grupo de radicales más alejados de Casa Rosada, respondió vía X a sus pares del centenario partido.
Bajo el título "Los jubilados no son la casta" reprochó el ajuste fiscal del Gobierno y al propio Presidente. Y continuó: "Es triste que opositores quieran usar a los jubilados como moneda de cambio de una negociación política. Basta de querer sacar ventaja a costa del sufrimiento de la gente".
Además los desafió a que expliquen "¿qué cambió de junio a hoy? Tengan un poco de coherencia".
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