Washington más aislado y Cuba no está sola

En pocos días, la 79na. Asamblea General de las Naciones Unidas analizará, debatirá y de seguro rechazará —por abrumadora mayoría—, el bloqueo de Estados Unidos contra Cuba, una política impuesta desde 1962 que viola el derecho a la vida, la salud, la educación y el bienestar de todos los cubanos de cualquier edad, desde los niños recién nacidos hasta los  2 478 087  adultos mayores de 60 años que la habitan. Lo sentimos en el desabastecimiento en nuestras tiendas, bodegas, mercados agropecuarios, en las largas colas que debemos hacer a diario, en los precios excesivos en productos básicos, en nuestros salarios devaluados. Pese a ello, los cubanos resistimos porque apreciamos y defendemos nuestra independencia y soberanía.

El mundo conoce y rechaza la injusticia y ya comenzó la Jornada por la Paz contra el Bloqueo a Cuba y el Terrorismo, que se hará sentir en todos los continentes, y hemos escogido algunos criterios y decisiones que se han escuchado en diversos escenarios políticos o en artículos periodísticos, en los cuales se denuncia, rechaza o califica al bloqueo, y donde podemos constatar que el mundo está con Cuba.

Andrés López Obrador, presidente de México: «Si se quisiera ayudar a Cuba, lo primero que se debería hacer es suspender el bloqueo como lo está solicitando la mayoría de los países del mundo. Ese sería un verdadero gesto humanitario».

Edgar Göll, periodista alemán: «El bloqueo estadounidense, que a menudo se denomina erróneamente embargo, con sus innumerables medidas individuales y sanciones, acompañadas de las actividades subversivas contra Cuba, ha existido en diversas formas desde el triunfo de la Revolución Cubana en 1959.

Estas medidas coercitivas unilaterales de EE.UU. van mucho más allá de los embargos comerciales convencionales, son integrales, tienen efectos extraterritoriales, incluyen esfuerzos multilaterales para provocar aislamiento económico y político, también restringen los bienes humanitarios en términos reales, y están embebidas en el esfuerzo de décadas para desestabilizar a la Cuba socialista y provocar un cambio de régimen»

Atilio Borón, periodista argentino: «El bloqueo es un crimen de guerra, un acto cobarde y brutal destinado a quebrar la autodeterminación nacional e instaurar un indigno protectorado que haga posible el saqueo de las riquezas nacionales y la completa subordinación de un país a los designios de Washington.

No solo eso: el bloqueo es también un crimen de lesa humanidad, pues produce un genocidio lento y silencioso, sin los sangrientos estruendos que hoy presenciamos en Gaza, porque también aquel se propone el exterminio de una parte de la población. Al privarla de alimentos, medicinas y servicios esenciales; al someterla con simpar perversidad el imperialismo persigue la alquimia de convertir el dolor en rabia, y esta en un movimiento sedicioso que derrumbe al Gobierno, concretando el tan ansiado “cambio de régimen” con el que Washington procura fortalecer su dictadura mundial».

Declaración de la Duma Estatal de Rusia, 9 de julio de 2024: «La presión ejercida por Estados Unidos sobre Cuba es un ejemplo flagrante de injerencia en los asuntos internos de un Estado soberano y de conducción desleal de las relaciones interestatales mediante medidas restrictivas. Los diputados de la Duma Estatal rechazan firmemente tales medidas unilaterales contra La Habana y consideran absolutamente injustificado e inaceptable cualquier elemento de presión sobre el Gobierno cubano y los ciudadanos de ese país.

«Las restricciones estadounidenses tienen un impacto destructivo en el proceso de integración plena de La Habana en la arquitectura financiera y económica mundial y limitan los derechos de los ciudadanos cubanos a una vida digna».

Cubanos residentes en el exterior han expresado su rechazo a la política genocida del Gobierno estadounidense. Foto:Cubadebate

Clare Daly, eurodiputada independiente de Irlanda en el Tribunal Internacional contra el Bloqueo a Cuba, Bruselas 2023: «El bloqueo, por supuesto, es uno de los ejemplos más duraderos y permanentes del nuevo orden internacional, ese tópico que se inventó Estados Unidos, que se inventó el Occidente para poder excusar todo lo que hacían en política internacional cuando en realidad lo que quieren es poner las normas y que el resto las cumplan. Y por supuesto, la joya de la corona y la hipocresía de Estados Unidos es que los cubanos lo único que quieren es su autodeterminación, elegir su forma de gobierno, y han sido víctimas de una guerra económica unilateral, ya desde hace muchísimos años, justo al lado de Estados Unidos, con esa violación flagrante del derecho internacional, y de los derechos fundamentales».

Massimiliano Smeriglio, eurodiputado del Partido Democrático de Italia: «Es importante sensibilizar a la opinión pública y a los decisores políticos. Es importante reiterar que el bloqueo es injusto, inmoral e ilegal; que además tiene repercusiones extraterritoriales, por lo que impide a terceros países y entidades tener cualquier tipo de relación con Cuba; que es un acto criminal porque pretende erosionar y extenuar a un pueblo que es resiliente, pero que ha sido hostigado durante décadas. El bloqueo es una violación del derecho internacional y de la soberanía de un pueblo. Y debemos asumir la responsabilidad de exigir su cese inmediato».

Peter Mertens, secretario general del Partido del Trabajo de Bélgica: «Estados Unidos, ya lo sabemos, lleva más de 60 años fomentando una guerra contra Cuba, visto como el bloqueo más largo de la historia moderna. Ese bloqueo es ilegal, inmoral y criminal, porque no es simplemente un bloqueo o un embargo contra un país independiente, que lo es, sino que, además, es un bloqueo contra un pueblo orgulloso que defiende su soberanía. Es un bloqueo a través del cual Estados Unidos intenta acabar con el ideal socialista de todas las maneras posibles.

«Así que detrás de ese bloqueo, de ese embargo criminal, detrás de esa serie interminable de violaciones de los derechos, se oculta un régimen que tiene miedo. Washington tiene miedo de una alternativa humana a ese mundo capitalista e imperialista. Por eso intentan acabar con la pequeña Cuba de todas las maneras posibles».

Manolo de los Santos, director ejecutivo de la plataforma The People’s Forum: «Ante las necesidades alimentarias en Cuba entendimos que era nuestra responsabilidad política y como seres humanos reaccionar ante la necesidad de nuestros vecinos cubanos».

«Hablamos directamente con 14 empresas en Estados Unidos y les dijimos de manera clara: queremos comprar un donativo para entregarlo directamente al pueblo de Cuba. Ninguna se atrevió a vendernos harina. Tuvimos que buscar otras compañías en todas partes del mundo y llegar tan lejos como a Türkiye, cuando estábamos simplemente a 90 millas de Cuba. Eso es genocidio, eso es un acto de guerra. (…) Biden debe aprovechar sus últimos meses en la Casa Blanca para quitar a Cuba de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo» e iniciar el proceso para «levantar el embargo o bloqueo contra Cuba». «Ya bastan los discursos, bastan los eslóganes, es momento de resetear las relaciones con Cuba».