El CGPJ elegirá entre dos mujeres a su presidenta: los vocales deciden entre Ana Ferrer o Isabel Perelló
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) acota a dos magistradas la elección de su presidencia y la del Tribunal Supremo (TS), a 48 horas del acto de apertura del Año Judicial que preside el Rey. Tras varias reuniones infructuosas desde el pasado julio, el Pleno del órgano de gobierno de los jueces tendrá que elegir entre las magistradas del Supremo Ana María Ferrer, quien desde el principio ha estado en la lista de aspirantes consensuada por los vocales, e Isabel Perelló. Quedan así fuera la principal candidata del sector progresista, la magistrada Pilar Teso, y el magistrado Pablo Lucas, que el sector conservador propuso como solución de consenso. Tras este acuerdo, los vocales se volverán a reunir a partir de las doce para la votación, en la que la elegida necesita concitar al menos doce de los veinte votos, la mayoría de 3/5 que fija la ley.
Ana María Ferrer (1959), que formó parte del tribunal del "procés", ya sabe lo que es romper techos de cristal en la judicatura, pues en abril de 2014 se convirtió en la primera mujer en formar parte de la Sala Penal del Tribunal Supremo. Recientemente se opuso a la decisión de la Sala de no aplicar la amnistía a Oriol Junqueras y defendió que el delito de malversación por el que sigue inhabilitado (y por el que también está procesado Carles Puigdemont) sí entra dentro del objeto de aplicación de la medida de gracia, en contra de lo que defienden sus compañeros del tribunal y el juez de la causa del "procés", Pablo Llarena.
Además, la magistrada progresista también discrepó en un voto particular de la sentencia que condenó a los expresidentes andaluces Manuel Chaves y José Antonio Griñán por el fraude de los ERE.
En cuanto a Isabel Perelló (1958), es magistrada de la Sala Tercera del alto tribunal desde 2009, tras pasar por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía y en la Audiencia Nacional, siempre en la jurisdicción contencioso-administrativa, y por el Tribunal Constitucional como letrada.
Los requisitos que la ley establece para presidir alto tribunal y el CGPJ son ser miembro de la carrera judicial con la categoría de magistrado del Tribunal Supremo y reunir las condiciones exigidas para ser presidente de Sala del mismo, o bien ser un jurista de reconocida competencia con más de 25 años de antigüedad en el ejercicio de su profesión.
En la sesión constitutiva del nuevo Consejo, celebrada el pasado 25 de julio, los vocales propusieron a siete candidatos, todos magistrados del Tribunal Supremo: cinco mujeres y dos hombres. Pilar Teso, Ana María Ferrer y Ángeles Huet fueron las apuestas del bloque progresista, mientras que sus compañeros conservadores se decantaron por Antonio del Moral, Pablo Lucas, Carmen Lamela y Esperanza Córdoba.
Ninguno concitó los apoyos necesarios, ni siquiera cuando la terna se redujo a Teso y Lucas, que obtuvieron cada uno diez votos, lo que llevó al Pleno a volver a abrir la lista a los siete aspirantes inicialmente propuestos.
Tras las estériles reuniones de agosto, el Pleno retomó el proceso de elección ayer mismo, y ante un nuevo fracaso en la negociación, los vocales decidieron abrir la lista de candidatos, lo que ha propiciado que Isabel Perelló irrumpa ahora como candidata del bloque conservador.