La Real apura el mercado para reforzar las dos áreas
"Lo bueno se hace esperar”. Frase tan clásica como certera en el caso del mercado realista. Es la que usó el club como gancho para el primero de los anuncios, casi a las once de la noche. El club donostiarra trabajó a conciencia hasta el final para cerrar las dos operaciones que consideraba claves: un central y un delantero. De esta manera calma las aguas, que venían en parte bravas por el mal arranque y las importantes salidas sin que llegara un nueve y un zaguero. Orri Oskarsson, fichado, para la delantera, y Nayef Aguerd, cedido, para la defensa son el cuarto y el quinto fichaje de este verano. También de los últimos de LaLiga.