La falsa reactivación volcánica que ha saboteado La Palma
En las últimas semanas, La Palma ha vuelto a ocupar un lugar central en los medios de comunicación, no por los avances en la recuperación tras la devastadora erupción volcánica de 2021, sino por la propagación de noticias alarmistas que sugieren una supuesta «reactivación» del volcán. Titulares sensacionalistas, como los publicados por algunos medios de comunicación nacionales, han generado una gran confusión y preocupación tanto entre los residentes de la isla como entre los posibles visitantes.
Este tipo de desinformación, que no se basa en evidencias científicas, está siendo fuertemente criticado por las autoridades locales y expertos vulcanólogos, quienes advierten sobre las graves consecuencias de este manejo irresponsable de la información.
El presidente del Cabildo de La Palma, Sergio Rodríguez, ha manifestado su indignación ante lo que considera un uso malintencionado y desinformado de los hechos relacionados con la situación volcánica en la isla. «Se está mal utilizando información referente al día a día de Puerto Naos», declaró Rodríguez, subrayando que los titulares que hablan de una «reactivación» del volcán no solo son falsos, sino que también «perjudican gravemente al trabajo que se sigue realizando día a día para recuperar espacios y devolver la actividad a uno de los puntos turísticos más importantes de la isla».
Las declaraciones del presidente no son casuales. Desde que finalizó la fase eruptiva en diciembre de 2021, La Palma ha estado inmersa en un arduo proceso de recuperación. Sin embargo, la difusión de noticias inexactas o sensacionalistas tiene el potencial de socavar estos esfuerzos, sembrando el miedo y la incertidumbre entre la población y los turistas. «No se han producido evacuaciones», insistió Rodríguez, explicando que lo que algunos medios han interpretado como señales de reactivación volcánica no son más que «incrementos puntuales en las lecturas de algunos medidores de gases, que se han controlado rápidamente simplemente con la ventilación natural de los espacios en los que están ubicados».
Este tipo de desinformación no solo afecta la percepción de la seguridad en la isla, sino que también tiene un impacto directo en la economía local, que aún se está recuperando de los efectos de la erupción.
Puerto Naos, una de las principales zonas turísticas de La Palma, ha sido particularmente afectada, y cualquier rumor o noticia falsa sobre una reactivación volcánica puede ahuyentar a los turistas y retrasar aún más la vuelta a la normalidad. Algo que ha ocurrido a raíz de las falsas comunicaciones sobre una supuesta reactivación volcánica, ya que varios turistas que tenían previsto visitar la isla en las próximas semanas, han cancelado estas vacaciones a causa de las recientes noticias.
Rodríguez enfatizó que, desde que el actual grupo de gobierno asumió la gestión de la emergencia, se han implementado protocolos rigurosos para monitorear y controlar la situación en las zonas afectadas. Estos protocolos, destacó, han permitido que «casi 900 familias dispongan de nuevo de su vivienda», un logro que podría verse comprometido si la desinformación continúa propagándose sin control. «La información que se conoce ahora lo que pone sobre la mesa es que el protocolo está funcionando perfectamente en el lugar más vigilado y controlado del mundo», afirmó el presidente, reiterando que no existe ningún problema de seguridad en las zonas habilitadas y que, de haber algún cambio en la situación, se tomarían inmediatamente las medidas necesarias para proteger a la población.
Asimismo, el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), una de las principales autoridades en la monitorización y estudio de la actividad volcánica en la región, también ha salido al paso de estas informaciones erróneas. En un comunicado reciente, Involcan expresó su «profunda preocupación» por la manera en que algunos medios de comunicación han abordado la situación volcánica en La Palma, destacando la irresponsabilidad de publicar titulares como «El volcán de La Palma vuelve a activarse tres años después de su erupción» o «El volcán de La Palma activa protocolos por concentración de gases en Puerto Naos». Según Involcan, estos titulares «no reflejan con precisión la realidad actual y carecen del respaldo de la comunidad científica y de los responsables de la gestión de la emergencia». La institución subraya la importancia de que la información sobre temas tan sensibles como la actividad volcánica sea rigurosa y verificada, evitando el sensacionalismo que solo busca atraer la atención del lector a costa de la verdad.
La crítica de Involcan no es una simple advertencia. La publicación de noticias inexactas o exageradas puede tener consecuencias muy reales en la percepción pública y en la gestión de la emergencia. En el contexto de La Palma, donde la erupción de 2021 dejó profundas cicatrices en la población, la difusión de información falsa o alarmista no solo confunde a los propios habitantes, sino que también socava la confianza en las instituciones y en los medios de comunicación. «La publicación de titulares sensacionalistas, que priorizan el impacto sobre la verdad, es una práctica que lamentablemente busca atraer la atención inmediata del lector, generando clics y aumentando la difusión a expensas de la precisión y la integridad periodística», señala el comunicado de Involcan, en un claro llamado a la responsabilidad de los profesionales de la información.
Papel contraproducente
En este sentido, el papel de los medios de comunicación es crucial. Los periodistas y editores deben entender que su trabajo no solo consiste en informar, sino también en educar y preparar a la población para enfrentar situaciones de riesgo. En el caso de La Palma, la difusión de noticias falsas o inexactas sobre la supuesta reactivación del volcán es un ejemplo de cómo el sensacionalismo puede tener un efecto contraproducente, generando un pánico innecesario y desviando la atención de los verdaderos esfuerzos de recuperación que se están llevando a cabo en la isla.
Sin embargo, la recuperación en La Palma continúa. Las autoridades locales, junto con expertos y científicos, han estado trabajando incansablemente para garantizar que la isla vuelva a la normalidad lo antes posible. Sergio Rodríguez ha destacado que en los próximos meses se implementarán nuevas medidas en Puerto Naos y La Bombilla para mitigar los efectos de la desgasificación y permitir que los residentes y turistas puedan volver a estas zonas con total seguridad.
Entre las medidas que se aplicarán se encuentran la implementación de técnicas novedosas, como el estudio de gradiente de presión de los gases y su reconducción, la aplicación de materiales especiales para contener gases en los lugares más críticos, y la instalación de sistemas de ventilación, tanto forzada como natural, para reducir las concentraciones de gases en las áreas donde se han detectado niveles elevados.
Estas acciones forman parte de un esfuerzo más amplio por devolver tanto a Puerto Naos como a La Bombilla a la normalidad, dentro de un contexto de desgasificación y recuperación tras la erupción volcánica.