Día de furia en LLA por una reunión que terminó a los gritos y la sospecha de funcionarios que colaboran con Macri
El PRO se sumó a los bloques opositores en la Cámara de Diputados que este miércoles rechazaron el DNU que aumentaba $ 100.000 millones en concepto de fondos reservados para la Secretaría de Inteligencia del Estado. Se trata de uno de los desmarques legislativos más fuertes del partido de Mauricio Macri para con el presidente Javier Milei, dos actores que mostraron una sintonía fina durante el debate de la Ley Bases y que, ahora, tienen colaboraciones más dosificadas.
"Esto no es el cambio", así tituló su comunicado de prensa el PRO Argentina minutos después de que se levantara la sesión de hoy, que recuerda el acompañamiento que el partido tuvo con La Libertad Avanza no se extiende al aumento de fondos de la SIDE. "En un contexto en el que 'no hay plata', y sin aclarar el uso de los fondos, no es el cambio", indicaron.
La jugada del macrismo era sospechada desde hace varios días. En el núcleo del PRO se había acordado, cuanto menos, no dar quórum. Según pudo reconstruir El Cronista, cinco minutos antes de la sesión Macri le dio la orden a su bloque para bajaran al recinto y votaran en contra, exponiendo aún más al oficialismo libertario.
"Cuatro semanas llevamos en el bloque de diputados debatiendo este asunto, y si bien no había consenso sobre como votar, si tuvimos consenso de no dar quorum", asestó en X el diputado Damián Arabia, quien integra el círculo de dirigentes de confianza de Patricia Bullrich.
La ministra de Seguridad no fue menos para la ocasión, que acusó a su anterior partido de jugar de estar del lado de los "criminales" y del "narcoterrorismo en Rosario" por haber votado negativamente por los fondos adicionales que, eventualmente, serían utilizados para más investigaciones.
Sospechas internas y quiebre en el bloque libertario
A pesar de que mejoró la sintonía entre Macri y Milei, dentro del Gabinete hay sospechas de que hay varios dirigentes que "son funcionales" para que el titular del partido amarillo gane predominancia en la agenda oficialista o que, cuanto menos, facilitan que el expresidente pueda condicionarla.
Son semanas de nerviosismo para el Gobierno. Altísimos funcionarios que antes se mostraban en contra de incorporar a la gestión a alfiles del PRO ahora, en privado, reconocen que tal vez no sea una mala idea. ¿A qué se debe esto? A la falta de cuadros técnicos capaces. En el Ejecutivo hay quienes se quejan por las capacidades de varios ministros y esto se traslada al Congreso, tanto para Diputados y el Senado. "Nuestro bloque es un papelón", se le escuchaba decir -resignado- a un legislador de LLA.
Un ejemplo de las tensiones acumuladas por el tiempo se dio horas después de la sesión en Diputados, cuando Martín Menem llamó a una reunión de bloque y en el transcurso trascendieron diversas acusaciones subidas de tono entre varios de sus miembros. No fue para menos la presencia de fuerzas de seguridad en la puerta del despacho.
Los libertarios registran desinteligencias en la cámara baja desde hace varios meses. Además de que a los pocos meses echaron a Oscar Zago de la jefatura de bloque con el visto bueno de Karina Milei; la visita de varios de ellos a genocidas de la última dictadura en Ezeiza generó un punto de quiebre.
Alegando que fue llevada sin saber el motivo, la mendocina Lourdes Arrieta, pidió armar una comisión para investigar el hecho y se desentendió del escándalo. Eso llevó a generar una nueva fractura dentro del bloque: en la reunión de hoy, una de las visitantes al penal, la santafesina Rocío Bonacci, habría mantenido un encuentro durísimo con Arrieta, el cual desembocó en la entrada del abogado de esta última a la reunión.
"La chica del patito en la cabeza [por Arrieta, que se la vio en una reunión de comisión con un patito colgado en la cabeza] no está bien. Su abogado no casualmente es el abogado de [Gerardo] Milman, que se está aprovechando de una chica que no tiene los patitos en fila", dijo a la salida del Congreso la diputada nacional Lilia Lemoine, que tiene la confianza total del Presidente.
Este episodio en Diputados solo es uno de los tantos que ocurrieron en los últimos días. Además de recrudecerse la interna de larga data entre Milei y Villarruel, el senador libertario Francisco Paoltroni desafió en público al asesor presidencial Santiago Caputo por ser uno de los responsables en elegir a Ariel Lijo para integrar la Corte Suprema de Justicia. A eso se plegó la vicepresidenta Victoria Villarruel, que en un almuerzo en el Colegio Público de Abogados se opuso a su designación.
El enfrentamiento público al principal alfil que tiene Milei en el Gobierno (junto a su hermana) marca un punto de quiebre en la relación al interior del oficialismo. "Lo de la SIDE es la culminación de un problema que viene más de fondo", indican desde Casa Rosada.
Y es que varias figuras comienzan a revelarse y a cuestionar a parte del círculo chico del Presidente. En particular, Caputo es uno de los principales opositores a una alianza de gobierno con el PRO y Mauricio Macri. Incluso tiene sus dudas al respecto del alcance que habría que darle a una coalición electoral el año próximo: prefiere que sea en algunas provincias y no en todo el país.
En Casa Rosada ven con malos ojos que crezca el ruido interno, ahora signado por los cuestionamientos al círculo chico de Milei. "Hay varios que se la tienen jurada a Caputo", agregan. Es por eso que no ven con buenos ojos que Villarruel continúe desmarcándose de la línea oficialista: acusan que sus encuentros privados con Macri facilitan que se posicionen de la misma manera en varios temas sensibles para el mileismo.
"Hay una especie de entente que está surgiendo que no me está gustando. Macri la abrazo a [Sandra] Pettovello cuando más le estaban pegando y creo que se la ganó", indican fuentes gubernamentales.
Nota en desarrollo.