¿Protestas sin razón?
De plano, los líderes de Morena en el Congreso se dijeron “tranquilos de conciencia” y “libres de culpa alguna”. En San Lázaro, Ignacio Mier respondió a los reclamos de los empresarios y deslizó que “sencillamente se cumplirá la ley”, “nosotros seremos responsables” y “no hay razón para preocuparse” en el tema de la representación partidaria en Cámara de Diputados, y “el INE hará lo propio”. “Estamos tranquilos de conciencia, se cumplirá con la Constitución, punto”. Y en el Senado, en la oficina del senador Ricardo Monreal, nos comentaron que las protestas de los trabajadores del Poder Judicial “no tienen razón de ser”, “ya se les dijo y ya quedó escrito” que sus derechos están garantizados. Al insistir en que “están siendo manipulados”, aseguran que no serán motivo para frenar la reforma del Presidente. Ya se verá esta semana el alcance del paro.
Y en el TEPJF, malos augurios
Y en medio de la incertidumbre sobre la decisión que tomarán los consejeros electorales del INE, este viernes, y la posterior resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación en torno a la probable sobrerrepresentación de Morena y sus aliados en el Congreso, ayer en las oficinas de la magistrada presidenta, Mónica Soto, sólo hubo malos augurios. Resulta que les canceló la audiencia que tenía con los representantes del Observatorio Ciudadano del Centro de Estudios para un Proyecto Nacional Alternativo, SC (CEPNA), presidido por académicos, precisamente para hablar de esa posible sobrerrepresentación. Mala señal para la discusión que viene en los próximos días en los órganos que definirán la conformación del Congreso.
Primeros efectos del paro en el PJ
Aunque se insiste en algunos círculos políticos y del sistema judicial que el paro parcial de labores en algunas sedes del Poder Judicial en el país no detendrá sus trabajos, ayer ya se reflejaron las primeras secuelas. En medio de las protestas y cierre de edificios, la Suprema Corte suspendió su sesión de este martes, porque los ministros pidieron tener un encuentro privado. El alto tribunal no dio más detalles del tema de ese encuentro, pero fue inevitable para el personal que labora en esa sede vincular la decisión con lo que sucede con las manifestaciones de protesta, se comentó. Y en el Tribunal Electoral no se sumaron al paro ni se suspendió la sesión de ayer, pero sí se retrasó su inicio por varias horas.
Salvavidas de la oposición
Como diría el clásico, “como anillo al dedo” y como “salvavidas” caen hoy a Alito Moreno y a Marko Cortés las protestas de trabajadores del Poder Judicial. Dirigentes y militantes del PRI y el PAN salieron a manifestar ayer su respaldo a quienes iniciaron un paro nacional contra la reforma que, aseguran, amenaza sus derechos laborales y la imparcialidad de la justicia, lo que pone en riesgo el Estado de derecho. “En el PRI nacional hemos anunciado que vamos en contra de esta reforma impulsada por el oficialismo”, expresó el guerrerense Manuel Añorve, mientras que el dirigente nacional panista manifestó que los trabajadores “deben saber que no están solos, que cuentan con el PAN para defender sus derechos y la división de poderes”. “Votaremos en contra de la dañina reforma”, remató Alejandro Moreno. La pregunta es: ¿y quién respalda y salva a la oposición que parece que se extingue ante la aplanadora del oficialismo?
Lo salvó la campana
Al que le asentó mejor ayer el homenaje del presidente Andrés Manuel López Obrador a los migrantes fue al titular de la Procuraduría Federal del Consumidor, David Aguilar Romero. Y es que, al final de la conferencia mañanera en Palacio Nacional, fuera ya de micrófono, los periodistas lo cercaron para preguntarle sobre las investigaciones que se le siguen por las denuncias de violencia laboral y acoso sexual, a cargo de la Secretaría de la Función Pública. Pero lo salvó la campana, porque, justo y casualmente en ese momento, el Presidente apuró el cierre ya de la conferencia para no permitir abordar el tema. Aunque la advertencia de los acuciosos reporteros quedó ahí: lo esperarán el próximo lunes.