Grave crisis de los restaurantes y cafeterías marroquíes
“Desde hace dos años y medio, desde la formación del actual gobierno, los precios de las materias primas y de los productos básicos para nuestra industria no han dejado de aumentar”. La alerta la vuelve a dar la federación nacional de propietarios de cafeterías y restaurantes de Marruecos. Nada va bien en el sector, señala el diario L'Economiste.
La situación la califican de “ insoportable”, tanto para los profesionales como para los presupuestos de sus clientes. “El precio de la carne roja aumentó de 60 a 140 dírhams el kilo, el del pollo de 11 a 28 dírhams. Los precios de la mantequilla aumentaron de 35 a 120 dírhams, los de las aceitunas de 12 a 40 dírhams y los del aceite de oliva de 25 a 110 dírhams. Los precios de la fruta también se han duplicado”, se indignan los profesionales (10 dirhams equivales a 0,93 euros).
Asimismo, el precio del café, producto básico en su actividad, ha aumentado un 100% en menos de 3 meses, añade la federación. También denuncia el aumento vertiginoso de los precios del combustible y de otros productos de primera necesidad. Para algunos ya no hay margen de beneficio. “Para otros, los ingresos han caído un 40%”, indica su presidente, Noureddine El Harrak.
Los propietarios de cafeterías y restaurantes también alertan del aumento del impuesto municipal sobre la ocupación del espacio público dedicado a terrazas.
En una carta, la citada organización profesional llama al presidente del Consejo de Competencia. Exigen una explicación por este continuo aumento de los precios. También se enviarán cartas a los ministerios de Hacienda y de Industria y Comercio. El objetivo es llamar la atención de los funcionarios gubernamentales sobre la crisis que enfrenta el sector.
“La cuestión suscita debate y preocupación. Algunos establecimientos han aumentado sus precios, otros están a la espera. Estos últimos aguardan a que la situación económica vuelva a la normalidad. No quieren repercutir el aumento de los precios de los productos básicos en el cliente”, afirma Noureddine El Harrak. Y añade: “ La inflación ha tenido un impacto muy duro en el poder adquisitivo de los ciudadanos. Su gasto en cafeterías y restaurantes ha disminuido. Por ejemplo, una familia acostumbrada a gastar 700 dírhams en un restaurante no supera hoy los 300 dírhams".